Vida Familiar 9

La Influencia De Las Madres

By Richard Martinez, Pastor, May 12, 2019

INTRODUCCIÓN

En el día de hoy celebramos el Día de las Madres y yo vivo bajo la convicción que no hay una mayor influencia en la vida y el desarrollo espiritual de nuestros hijos, que aquella que les es impartida por los padres. Creo que los padres debemos ser el mejor ejemplo de Fe que nuestros hijos deben tener. Por eso es, que en este día quiero animar a todas las Madres a entender la influencia que tienen en la formación de Fe de sus hijos.

La palabra influencia para mí es una de las palabras más impresionantes e importantes cuando hablamos de la Fe.

Influencia significa: El acto con el que se puede guiar a una persona por un camino determinado; poder de una persona para determinar o alterar la forma de pensar de alguien.

Medite en lo impresionante que es ese significado en relación a los padres en la Fe de sus hijos, pero en especial las Madres. En otras palabras, hoy veremos cómo es que Dios ha capacitado a los padres en general, pero en este caso cómo Dios ha capacitado a las Madres con la habilidad de alterar la forma de pensar de sus hijos.

MENSAJE

Influencia De La Madre

En toda la Biblia vemos cómo Dios nos habla de la responsabilidad de los padres en la formación de los hijos. Sin embargo, a las Madres Dios les dio una habilidad única de nutrir a sus hijos. Por eso vemos que aún en lo natural, Dios equipó a las Madres con la habilidad de nutrir a sus hijos; por eso cuando lactan, ellas poseen todas las vitaminas y nutrición necesaria para la formación saludable de los hijos. Pero aún en lo espiritual las madres tienen una habilidad única de ser una influencia importantísima en la vida de sus hijos.

Cuando miramos Proverbios 1: 8 nos dice: ¨Hijo mío, presta atención cuando tu padre te corrige; no descuides la instrucción de tu madre.¨

Aquí vemos que la crianza de los hijos es un trabajo en equipo; por eso es que hablamos tanto acerca del matrimonio y el por qué debemos luchar por la familia, porque la formación de los hijos es un trabajo en equipo de papá, mamá y abuelo. Bueno aquí no dice abuelo, pero sí papá y mamá.

Nos explica aquí que el padre corrige y que las madres instruyen;

El significado de la palabra instruir es: proporcionar conocimientos, habilidades, ideas o experiencias a una persona para darle una determinada formación y nos dice que las Madres tienen una habilidad de dar instrucción a los hijos.

Inclusive Dios cuando leemos lo que dice Isaías 66: 13 dice: ¨Los consolaré allí, en Jerusalén, como una madre consuela a su hijo¨.

Dios compara el consuelo que Él produciría sobre Israel como el consuelo de una Madre con su hijo. Es impresionante que la mejor ilustración que Dios haya usado para poder hablarle al pueblo de Israel del consuelo de Dios era comparándolo con la forma en que una Madre consuela a su hijo. Así de impresionante es la influencia de una Madre en la vida de sus hijos. Por eso mamá, aunque se te haga difícil creerlo, tú eres una gran influencia en la vida de tus hijos.

Influencia Espiritual

Las Madres también tienen una increíble influencia espiritual en la vida de sus hijos. Podemos ver una ilustración de la influencia espiritual de una Madre sobre su hijo en

2 Timoteo 1: 5 – 7 donde el Apóstol Pablo le dice a Timoteo: ¨5 Me acuerdo de tu fe sincera, pues tú tienes la misma fe de la que primero estuvieron llenas tu abuela Loida y tu madre, Eunice, y sé que esa fe sigue firme en ti. 6 Por esta razón, te recuerdo que avives el fuego del don espiritual que Dios te dio cuando te impuse mis manos. 7 Pues Dios no nos ha dado un espíritu de temor y timidez sino de poder, amor y autodisciplina.¨

Timoteo era hijo de una madre creyente judía y un padre griego, lo que significa que el padre de Timoteo no era creyente; pero Pablo afirma que la fe de Timoteo venía por influencia de una madre y una abuela que eran dos mujeres llenas de fe y que la enseñaron a su hijo y nieto Timoteo.

Inclusive, él anima a Timoteo diciéndole que él tenía la habilidad de mantenerse firme en su Fe en medio de las dificultades, porque tenía un ejemplo de Fe que aprendió de su madre y su abuela.

En otra Escritura, Pablo afirma esto a otro nivel, en

2 Timoteo 3: 14 – 15 ¨14 Pero tú debes permanecer fiel a las cosas que se te han enseñado. Sabes que son verdad, porque sabes que puedes confiar en quienes te las enseñaron. 15 Desde la niñez, se te han enseñado las sagradas Escrituras, las cuales te han dado la sabiduría para recibir la salvación que viene por confiar en Cristo Jesús.¨

También Pablo le habla a Timoteo que habrá personas que vienen a engañar, que vienen a persuadir y le dice a Timoteo en los

  1. 14 – 15 que: Permanezca fiel a las cosas que se le habían enseñado.

Lo que se le había enseñado él sabía que era verdad; porque podía confiar en quien se las había enseñado (su madre y su abuela). Su madre y su abuela le enseñaron las sagradas Escrituras desde la niñez.

Por el ejemplo y las enseñanzas de su madre y su abuela, Timoteo había obtenido sabiduría para confiar en Jesús. Todo esto vino como consecuencia de la influencia de una madre que decidió ser un ejemplo de Fe a su hijo. Así mismo en este tiempo las Madres son una gran influencia de Fe y devoción para sus hijos.

Aunque veas que tus hijos hoy no quieran nada con Dios, tú persiste en ser fiel a Dios, porque la influencia no sucede de la noche a la mañana, la influencia ocurre con el ejemplo y el tiempo.

Me explico; si una madre le dice al hijo: tú tienes que leer la Biblia si quieres que te deje salir con tus amigos; claro que el hijo va a leer la Biblia; pero eso no es influencia; pero si el hijo ve que la madre constantemente lee la Biblia, ora, le cree a Dios, sirve a Dios, vive apasionada por Dios, con el tiempo eso se convierte en una influencia en la vida de ese hijo y ahora cuando él sea adulto, la influencia de la madre sobre el hijo; hablará más fuerte a la vida del hijo que la influencia del mundo.

¿Por qué usted cree que la mayoría de los hijos que se rebelan contra Dios, vienen nuevamente y se entregan a Cristo cuando ahora de adultos tienen familia o tienen problemas? Porque alguien fue una influencia de Fe en la vida de sus hijos.

La Autoridad De Una Madre

Influencia también refleja autoridad. No pudiéramos ser influyentes si no tuviéramos autoridad y las madres tienen una autoridad impresionante en la vida de sus hijos. Yo sé lo que algunas madres pueden pensar en este momento: ¿Cómo autoridad? ¿Si mis hijos no me hacen caso?

Autoridad no habla de dominio, autoridad es gobierno y las madres tienen autoridad porque no importa la condición en que una madre se encuentre, no importa la edad que tenga, las madres nunca se rinden con sus hijos, nunca dejan de orar por sus hijos, nunca dejan de luchar por ellos; las madres son persistentes, y cuando un hijo está en crisis, las madres hacen lo que sea por ellos.

Tomemos el ejemplo de la madre en Mateo 15: 21 – 28 que fue a buscar a Jesús porque su hija estaba poseída por un demonio y nos dice en Marcos 7: 24 que Jesús no quería que nadie supiera dónde se estaría hospedando, en otras palabras, Jesús se estaba escondiendo.

Pero las madres tienen tal autoridad y tal persistencia por sus hijos que ni Jesús mismo se pudo ocultar de una madre con una hija en necesidad.

Mateo nos dice en el V. 23 que los discípulos estaban enojados, que los discípulos en la cara de ella misma le dijeron a Jesús:

¨Dile que se vaya. Nos está molestando con sus súplicas¨.

Te imaginas esta escena que vemos en el V. 23. Una madre desesperada por la condición de su hija; va a Jesús y nos dice que Jesús no le contestó ni una sola palabra; lo que significa que todo lo que esta mujer escuchaba eran las críticas de los discípulos.

Pero eso no detuvo a esta madre; ella fue persistente, ella no se rindió a ella, no le importó las críticas, los insultos, las humillaciones de los discípulos, porque ella tenía a una hija en crisis.

Por eso es que yo animo a cada mamá que está aquí, que no se rinda, que persista en oración, que continúe clamando a Dios por sus hijos, que aunque el mundo te critique que te la pasas en la Iglesia, que te la pasas orándole a un Dios que no contesta, aunque te digan: mira tus hijos están peor que antes, aunque todo lo que escuches sea el juicio de los demás diciendo para de creer, para de confiar, ya vete, ya no molestes a Dios, es más; ¿dónde está tu Dios?

Mamá; tú insiste en creer en Jesús, insiste en ir a los pies de Jesús, insiste en buscar a Jesús, para que te cumpla la petición de tu corazón; aunque sientas que no te escucha, aunque sientas que se está escondiendo, aunque sientas que nada está pasando; tú sólo insiste.

Esta madre no se rindió hasta que Jesús le contestó la petición a favor de su hija, porque las madres son así de persistentes; así que no te rindas hasta que no veas tu petición cumplida.

CONCLUSIÓN

Las madres tienen una autoridad e influencia única. Por ejemplo en 2 Reyes 4: 8 – 37 vemos una madre que nos explica que su hijo se murió; esta mujer quiso honrar a Dios haciéndole un cuarto al profeta Eliseo en su casa; esto era una mujer de gran convicción y Fe en Dios. (V. 9 – 10)

Luego que ella tuvo un hijo, nos dice la Biblia que su hijo se murió y ella tomó a su hijo y lo subió al cuarto que había hecho para Eliseo y luego decidió buscar a Eliseo; cuando ella habló con el padre del niño el trató de persuadirla de no ir, pero ella no hizo caso; porque nadie detiene a una madre de agotar sus recursos y fuerzas a favor de sus hijos. (V. 18 – 23)

En los V. 25 – 30 nos relata que cuando Eliseo vio a la mujer venir de lejos le dijo a Giezi su criado, que le preguntara a la mujer: ¿Si todo estaba bien? A lo que ella le contestó a Giezi que sí, que todo estaba bien. Pero luego cuando ella llegó a donde estaba Eliseo, se tiró a los pies de Eliseo y se agarró de sus pies desconsolada.

La razón por la que yo creo que esta madre le contestó a Giezi que sí que estaba bien, era porque ella sabía que Giezi era el criado y ella no quería hablar con él, ella quería ir hasta Eliseo.

Eliseo envió a su siervo a orar por el muchacho; pero la madre le dijo en el V. 30: Tan cierto como que el Señor vive y que usted vive, yo no regresaré a mi casa a menos que venga conmigo. En otras palabras; yo no me voy de aquí hasta que tú vengas conmigo, yo no te suelto hasta que tú hagas un milagro en mi vida. Y así sucedió, el profeta fue y resucitó al hijo; porque una madre es persistente y no se rinde. Así de persistentes tienen que las madres ser en la Presencia de Dios por y a favor de sus hijos.

Así es que una madre tiene que orar por sus hijos: Señor yo no te suelto, yo no voy a parar de orar todos los días, yo no voy a parar de creer en Ti, yo no voy a cesar de servirte, alabarte y honrarte; yo no voy a dejar de buscarte hasta que Tú cumplas mi petición, hasta que mis hijos todos te amen.

Aunque vean a sus hijos con una Fe muerta, aunque vean que van de mal en peor, aunque pareciera que el desenlace de sus vidas es lo peor, Mamá no te rindas persiste para que tus hijos: esa Fe no fingida, una Fe firme y sincera y que esa Fe sea un día el ejemplo que ellos imitarán.

Oremos en este día por todas las Madres, oremos que Dios te dé fuerzas para luchar, ánimo para persistir, pasión para no desmayar, paz para confiar. En este día quiero tocar un tema sensitivo; porque hay Madres aquí que han perdido hijos y eso es un dolor que no hay nadie que lo puede entender a no ser que lo haya atravesado, ese es el mayor dolor que cualquier Madre puede atravesar; pero yo quiero decirte que la influencia de una Madre es impresionante; y que nuestro Dios es tan maravilloso que creó la Eternidad para nosotros y que Él conoce tu dolor, está contigo, te consuela, fortalece; no te deja, no te suelta, ni lo hará nunca.

Lo segundo es que quisiera que toda Madre medite que: Tú eres mamá; pero también eres hija, eres hija de un Rey, eres hija del Creador de los cielos y la tierra, eres hija de un Dios que te ama tanto que fue capaz de crucificar a Su Hijo para mostrarte Su amor y como hija; tu Padre, tu Rey, tu Señor, tu Salvador ha escuchado, escucha y escuchará las peticiones de tu corazón; tu Padre jamás te dejará en sufrimiento y dolor.

Mamá, vive una Fe no fingida, una Fe apasionada para que un día tus hijos puedan declarar como tú:

QUE NO HAY MEJOR QUE SER CRISTIANOS.