Gálatas 4

Gálatas

By Alex Robles, Pastor Jovenes Adultos, June 27, 2019

INTRODUCCIÓN

Continuamos estudiando el Libro de Gálatas y vimos en el estudio de los capítulos anteriores, cómo Pablo continúa argumentando la firmeza de su Fe en Cristo y lo maravilloso del Evangelio; y en el transcurso de este capítulo 4 veremos por qué Pablo estaba tan insistente en dejar claro a los Gálatas su preocupación de que fueran confundidos por falsos maestros.

Cuando Pablo escribió la Carta a los Gálatas, la mayoría de los primeros cristianos fueron judíos que habían crecido bajo la tutela de las leyes religiosas y costumbres del Judaísmo. Pero cuando estos judíos escucharon el mensaje del Evangelio y comenzaron a seguir a Cristo, su relación con Dios cambió. Alcanzaron un nivel de madurez espiritual porque habían recibido una revelación completa de Dios a través de Cristo. Pero después de un tiempo, algunos de estos primeros judíos cristianos perdieron la seguridad y extrañaron sus prácticas judías, y comenzaron a mezclar su Fe cristiana con los elementos anticuados de la Ley y su herencia, e insistían que otros deberían de hacer lo mismo.

Ahora hoy, quiero que tengamos bien claro esto con respecto a la ley y la gracia, porque yo sé que para muchos pudiera parecer algo confuso y está bien, estamos aquí para aprender.

¿PREGUNTA DE APLICACIÓN?

  • Cómo interpretar hoy que ya no vivo por la Ley sino por la Gracia?
  • Entonces ya no tenemos que cumplir los mandamientos?
  • Puedo hacer todo lo que quiera sin temor a consecuencias porque ahora vivo por la gracia?

MATEO 5:17 17 »No malinterpreten la razón por la cual he venido. No vine para abolir la ley de Moisés o los escritos de los profetas. Al contrario, vine para cumplir sus propósitos.

MENSAJE

DIFERENCIA ENTRE SER LEGALISTA Y RESPETAR LA LEY.

GÁLATAS 4:8-19

Pablo nos habla en Gálatas y nos muestra que Cristo no es la ley, aunque la cumplió totalmente, sino que Cristo vino y se convirtió en la norma, en el ejemplo, en el modelo a seguir del creyente, y Él es Santo, es el poder para que podamos caminar con Dios.

Pablo se oponía al legalismo con el mismo énfasis que apoyaba el respeto a las leyes de Dios.

Algunas personas piensan que el problema de los Gálatas era pensar que Dios aún ordenaba obedecer sus leyes. Sin embargo, el problema era que estaban siendo confundidos y no podían ver la diferencia que tanto Pablo les habló entre ser legalista y respetar la Ley.

Pablo se oponía al legalismo con el mismo énfasis, con la misma intensidad, con el mismo celo que apoyaba el respeto a las leyes de Dios. La diferencia entre estos conceptos puede compararse a la manera en que como padres ponemos las reglas en el hogar.

Un hogar donde los padres llenan a sus hijos con reglas estrictas y les dicen que los amarán como hijos sólo si obedecen las reglas. Este hogar lo que en realidad es; una dictadura maquillada con amor, ya que los padres imponen reglas para cada aspecto de la vida de sus hijos, desde al amanecer hasta el anochecer, y los castigan severamente si no las respetan. En este caso, el “amor” tendría que ser ganado y, por lo tanto, no sería amor verdadero.

Por otro lado, en un hogar donde los padres sí ponen reglas pero es más importante el ejemplo que dan a sus hijos y les modelan la forma en que deben vivir su vida; estos padres aman a sus hijos incondicionalmente, pero a la vez esperan que ellos se comporten de la manera que ellos mismos lo hacen, en un hogar como este las reglas siempre son respetadas porque el ejemplo las respalda.

Cuando los hijos desobedecen las reglas, los padres les corrigen con amor y les piden cambiar su comportamiento. Así, los hijos siempre son amados y también guiados. Dios es una familia; sus leyes son las reglas del hogar que como sus hijos debemos obedecer. Él nos ama incondicionalmente, pero, al mismo tiempo, nos muestra cómo deben vivir a través de Su Palabra. Cuando desobedecemos sus leyes (y todo ser humano peca), Dios nos corrige y nos pide que cambiemos nuestro comportamiento. Dios nos concibe como Sus hijos en amor a través del sacrificio de Cristo en la Cruz y luego nos guía en ese amor a través de sus beneficiosas reglas del hogar, sus leyes. Respetar las leyes es normal y saludable tanto en una familia física como en la familia de Dios.

El mayor problema que vivían los Gálatas era que había muchos falsos maestros que les decían que la única manera de agradar completamente a Dios era si recibir a Cristo pero también circuncidarse y la circuncisión representa el esfuerzo humano por agradar a Dios y al hacerlo de esa manera desacreditaban el sacrificio de Cristo en la Cruz.

Pablo continúa argumentando a favor de la gracia y se esfuerza por dejarles claro que lo que Dios busca de ellos es la circunsición pero espiritual es decir un compromiso que se hace desde el corazón, es un pacto que excede a la misma Ley porque ya no es por obligación o imposición sino por convicción.

HIJOS NO ESCLAVOS.

GÁLATAS 4:21-31 Los dos hijos de Abraham 21 Díganme ustedes, los que quieren vivir bajo la ley, ¿saben lo que en realidad dice la ley?22 Las Escrituras dicen que Abraham tuvo dos hijos, uno de la mujer esclava y el otro de su esposa, quien había nacido libre.[e] 23 El nacimiento del hijo de la esclava fue el resultado de un intento humano por lograr que se cumpliera la promesa de Dios; pero el nacimiento del hijo de la libre fue la manera en que Dios cumplió su promesa. 24 Esas dos mujeres son una ilustración de los dos pactos de Dios. La primera mujer, Agar, representa el monte Sinaí, donde el pueblo recibió la ley que los hizo esclavos. 25 Y ahora Jerusalén es igual que el monte Sinaí, en Arabia,[f] porque la ciudad y sus hijos viven bajo la esclavitud de la ley; 26 pero la otra mujer, Sara, representa la Jerusalén celestial. Ella es la mujer libre y es nuestra madre. 27 Como dijo Isaías: «¡Alégrate, oh mujer sin hijos, tú que nunca diste a luz! ¡Ponte a gritar de alegría, tú que nunca tuviste dolores de parto! ¡Pues la mujer desolada ahora tiene más hijos que la que vive con su esposo!»[g]. 28 Y ustedes, amados hermanos, son hijos de la promesa igual que Isaac; 29 pero ahora son perseguidos por los que quieren que cumplan la ley, tal como Ismael —el hijo que nació del esfuerzo humano— persiguió a Isaac, el hijo que nació por el poder del Espíritu. 30 ¿Pero qué dicen las Escrituras al respecto? «Echa fuera a la esclava y a su hijo, porque el hijo de la mujer esclava no compartirá la herencia del hijo de la mujer libre»[h]. 31 Así que, amados hermanos, no somos hijos de la mujer esclava; somos hijos de la mujer libre.

Pablo argumentó su caso en contra de los falsos maestros enfocándose en el registro bíblico de las esposas y los hijos de Abraham en Gálatas capítulo 4 versículos 21 al 31. Pablo explicó que en Génesis capítulo 15 Dios había prometido a Abraham un heredero por medio de su esposa Sara. Pero Sara era estéril y había pasado la edad de procrear, así que recibir un heredero a través de ella requería que Abraham tuviera Fe en la promesa de Dios.

Pero, como nos dice Génesis capítulo 16, antes de que naciera Isaac, Abraham se cansó de esperar que Dios le diera el hijo de la promesa. Así que, fue con la esclava de Sara, Agar, para tener un hijo. Al hacer esto, Abraham buscó asegurar su legado con esfuerzos humanos, por el esfuerzo de la carne. Hagar tuvo a Ismael, hijo de Abraham, pero Ismael era un hijo de la carne. Dios lo rechazó como el heredero de Abraham y vino a representar a todos los que se enfocan en la carne como la manera de salvación.

Aun en nuestros días se vive la situación que los Gálatas estaban viviendo, donde en las Iglesias hay personas que tratan de imponer cargas en las vidas de aquellos que se acercan diciéndoles que deben dejar de tomar para venir a la Iglesia, que deben dejar las drogas antes de siquiera pensar en acercarse a buscar a Dios; hay personas que han sido lastimadas porque se les ha dicho tú no puedes estar en la Iglesia si aún fumas, si eres un alcohólico, si usas drogas; es más si eres un adúltero ni se te ocurra ir a la Iglesia porque ahí se abre la tierra y te traga directo al infierno, tú no puedes buscar a Dios si de 10 palabras, 9.5 son maldiciones, tú no puedes, necesitas dejar de hacer todo lo malo y entonces podrás tener un lugar aquí; eso familia es enfocarse en la carne o en la ley como manera de salvación.
> Lucas 4:18 > 18 El Espíritu del Señor está sobre mí, > Por cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; > Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; > A pregonar libertad a los cautivos, > Y vista a los ciegos; > A poner en libertad a los oprimidos;

Cristo dice: Yo a nadie hecho fuera, venid a mí todos los cansados y cargados que yo os haré descansar, y dice si tus pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos, si fueren rojos como el carmesí vendrán a ser como blanca lana. Cristo dice tú no eras digno, Yo te hice digno; tú no te hiciste digno por tus obras sino por mi sacrificio en la Cruz.

Yo no vine a los sanos, Yo vine a los enfermos.

Si alguien se ha sentido indigno de estar en la Iglesia porque llevas mucho tiempo y aún no ves un cambio en tu vida o en la de tu familia, y eso te desanima y te sientes desgastado, sin fuerzas y haz llegado a pensar que todo este tiempo ha sido inútil, que mejor te vas a tratar por tu cuenta; déjame decirte que eso también es querer ganarse el favor con esfuerzo humano.

Sin embargo, Abraham al confiar en que Dios iba a cumplir Su promesa, Sara tuvo un hijo, Isaac. El hijo de Sara, Isaac, era un hijo de la promesa, y fue aceptado como el heredero de Abraham y el representante de todos los que creían.

Después de mostrar este contraste entre las esposas y los hijos de Abraham, Pablo concluyó de esta forma en Gálatas capítulo 4 versículo 31:

De manera, hermanos, que no somos hijos de la esclava, sino de la libre. (Gálatas 4:31)

La Fe en la promesa de Dios a Abraham es el camino de la salvación para todas las familias de la tierra. Cuando Dios le dio la promesa a Abraham, aun no había entregado los diez mandamientos al pueblo de Israel, lo que significa que la justificación por la Gracia siempre fue el plan original de Dios. Dios estaba entregando la provisión eterna para la salvación de todos, la promesa cumplida se llama Cristo, quien al venir a morir en la Cruz del Calvario nos alcanzó a judíos y no judíos.

> GÁLATAS 3:26-29 > 26 Pues todos ustedes son hijos de Dios por la fe en Cristo Jesús. 27 Y todos los que fueron unidos a Cristo en el bautismo se han puesto a Cristo como si se pusieran ropa nueva.[m] 28 Ya no hay judío ni gentil,[ni] esclavo ni libre, hombre ni mujer, porque todos ustedes son uno en Cristo Jesús. 29 Y ahora que pertenecen a Cristo, son verdaderos hijos[o] de Abraham. Son sus herederos, y la promesa de Dios a Abraham les pertenece a ustedes.

Cristo es la promesa de Dios para todos nosotros, es para ti que te sientes sucio, sucia, para ti que por temor al rechazo no te acercas a una Iglesia.

En Dios nadie se queda afuera en Su plan perfecto, Él nos amó desde antes de nacer para que lo conocieramos, nos perdonara, nos diera salvación.

NO HAY NADA MEJOR QUE SER CRISTIANO