INTRODUCCIÓN

Continuamos estudiando del Libro de Santiago y hemos estado aprendiendo cómo Santiago le escribe esta carta a los dispersos, a aquellos que esperando el regreso de nuestro SEÑOR JESUCRISTO más bien tuvieron que salir huyendo contra la persecución a los Cristianos.

La carta pareciera que nos da ciertos códigos de ética y conducta, pero la verdad es que la carta es mucho más que eso, es de ánimo y de mantener la fe, el testimonio y el propósito en medio de las situaciones difíciles.

En el primer capítulo de la carta les anima a que mantuvieran el gozo en las pruebas, a que no sean vencidos por la tentación de la prueba y a que sean hacedores de la Palabra.

Para poder entender lo que nos está diciendo en el Cap. 2 necesitamos visitar nuevamente cómo es que concluye.

Santiago 1: 26 – 27

MENSAJE

En el Capítulo 1 Santiago está hablando de la necesidad que tenemos de apoyar y ayudar a aquellas personas que están en una necesidad mayor que la nuestra. Recuerden que está escribiendo a los dispersos y lo interesante es que le está diciendo a personas que están pasando necesidad, que aunque están pasando necesidad su responsabilidad es ayudar a personas que están pasando mayor necesidad.

Me explico: lo que Santiago está explicando es que mantengan el gozo y la fe en medio de las pruebas; que mantengan un buen testimonio, que sean hacedores de la Palabra y culmina enseñándoles: Aunque ustedes mismos están en necesidad, hay un grupo en medio de ustedes que están en mayores apuros, porque a su necesidad se suma que son huérfanos y viudas; a estos tienen que ayudarles porque si no su devoción es vana.

Esto es clave para poder entender todo el capítulo 2, es que aun en medio de la calamidad, la confianza debe estar puesta en el SEÑOR y la manera en que se demuestra es por medio del ayudar al prójimo.

Esto es algo que nosotros debemos aprender, porque muchas personas generalmente cuando están pasando por alguna situación difícil y más cuando esa situación es económica, inmediatamente recurren a limitar su obediencia al dar y mucho menos el ayudar a otras personas; el hacer esto de poner nuestra confianza en el SEÑOR y no en nosotros mismos; por eso Santiago lo explica como que la verdadera devoción a DIOS es la inversión que hacemos en los demás.

1. LA INDIFERENCIA CON EL PRÓJIMO.

Santiago 2: 1-9

A simple vista el texto está hablando de tener mucho cuidado cuando llega una persona y se le da preferencia por su posición social, económica o su influencia mientras a la vez se menosprecia a la persona que tiene menos.

Santiago está expresando que si una persona bien vestida entra en nuestra congregación y porque tiene apariencia de estar bien económicamente lo tratamos con preferencia entonces estamos mal por lo que dice el

5. 4 ¨¿acaso esta discriminación no demuestra que sus juicios son guiados por malas intenciones?¨.

Pero cuando leemos estos versículos podemos cometer un grave error, porque aunque a primera vista pareciera que Santiago está enseñando que debemos dar un lugar de preferencia a los pobres, ESO NO es lo que está enseñando. Por esta razón es que muchas Iglesias discriminan contra los ricos y favorecen a los pobres y otros toman a los ricos discriminados y minimizan a los pobres.

Lo que Santiago está enseñando se encuentra inmediatamente en el

5. 1: ¨Mis amados hermanos, ¿cómo pueden afirmar que tienen fe en nuestro glorioso Señor Jesucristo si favorecen más a algunas personas que a otras?¨.

Lo que está enseñando no es que debemos favorecer al pobre sobre al rico, ni al rico sobre el pobre, sino que en nuestra posición de fe en JESUCRISTO NO DEBEMOS HACER DISTINCIÓN DE PERSONAS.

Luego lo que nos da en los v. 2 – 7 es un ejemplo, es una ilustración. Por eso el lo vuelve a afirmar en los

5. 8 – 9 ¨Por supuesto, hacen bien cuando obedecen la ley suprema tal como aparece en las Escrituras: «Ama a tu prójimo como a ti mismo»; pero si favorecen más a algunas personas que a otras, cometen pecado. Son culpables de violar la ley.¨

En estos versículos él vuelve a afirmar lo que vimos en Santiago 1: 26 – 27 y lo que vimos en Santiago 2: 1 que nos enseña que la verdadera devoción a DIOS es la inversión en los demás.

Se hace distinción de personas por su cultura, por su educación, por sus preferencias o gustos, por la música, por la región donde nació, por su madurez espiritual, en fin, todo aquello que nos divida es pecado.

No es la primera vez que la Biblia habla de consecuencias para aquel que toma una actitud de menosprecio con el prójimo. Mencionamos anteriormente que el Libro de Santiago pareciera que es un recordatorio de lo que CRISTO predicó en el Sermón del Monte.

Mateo 5: 21 – 22 CRISTO dijo ¨Amarás a tu prójimo como a ti mismo¨.

No fue una sugerencia, fue una orden. ¿Por qué el que hace distinción de personas le cuenta como pecado? Porque no ha entendido el Evangelio o no ha creído el Evangelio; porque el que entiende y cree el Evangelio sabe y cree que CRISTO murió por todos.

Murió por el rico y por el pobre, por el culto y por el inculto, por el latino, el gringo, el europeo y el asiático, por el que te cae mal y el que te cae bien, por el que asesina y por el que cuida enfermos, por la prostituta y la mujer virtuosa; por el hombre con carácter y el que decidió suicidarse, murió por el homosexual, el transexual; por todos los que pertenecen a la comunidad LGTBI, murió por mis pecados y por los de mi familia, murió por todos y cada uno de los seres humanos que han tocado, tocamos y tocarán este planeta.

Cada vez que nosotros discriminamos; criticamos, juzgamos, nos burlamos, rechazamos a las personas por su condición social, racial, cultural, económica, de salud, moral cometemos pecado y quedamos por la ley como transgresores.

Santiago 2: 10-13

Cuando Santiago tira esa bomba, él ahora toma los v. 10 – 13 para explicar de dónde él sacó esa declaración o base teológica; y comienza a explicarlo y explica algo que es muy importante, nos explica en los v. 10 – 12 que no hay manera posible que nadie pueda ser justificado por la ley, porque el que viola un punto de la Ley, los viola todos; por lo tanto el que hace acepción de personas está violando uno de los mandamientos, por lo tanto los está violando todos.

Pero también nos explica en el

5. 13 ¨No habrá compasión para quienes no hayan tenido compasión de otros, pero si ustedes han sido compasivos, Dios será misericordioso con ustedes cuando los juzgue¨.

Por eso nos dice: Para el que no tenga misericordia con los demás y haga acepción de personas, tampoco DIOS tendrá misericordia con él; el día del juicio.

¿Dónde escuchamos esto? en el Sermón del Monte.

Mateo 7: 1 – 2 ¨No juzguen a los demás, y no serán juzgados. 2 Pues serán tratados de la misma forma en que traten a los demás.[a] El criterio que usen para juzgar a otros es el criterio con el que se les juzgará a ustedes..¨

2. FE POR OBRAS O SIN OBRAS.

Santiago 2: 14-21

Por un lado en estos textos tenemos un grupo de personas que piensan que para ser salvos es necesario tener fe en CRISTO JESÚS y luego añadirle a la fe, obras; porque vemos aquí que nos dice el v. 17 ¨Como pueden ver, la fe por sí sola no es suficiente. A menos que produzca buenas acciones, está muerta y es inútil. Lo que nos lleva a preguntarnos: ¿Cuál es? A lo que yo creo que no es ninguna de las dos.

Por nada del mundo podemos decir, asumir o llegar a pensar que tenemos que añadirle a la salvación mis obras; porque si eso es así, entonces invalidamos el sacrificio en la Cruz porque lo vimos en muchas ocasiones, como en

Efesios 2: 4 – 5 ¨Pero Dios es tan rico en misericordia y nos amó tanto 5 que, a pesar de que estábamos muertos por causa de nuestros pecados, nos dio vida cuando levantó a Cristo de los muertos. (¡Es solo por la gracia de Dios que ustedes han sido salvados!)¨

También podemos descartar este pensamiento por medio de

2 Corintios 4: 7 ¨Ahora tenemos esta luz que brilla en nuestro corazón, pero nosotros mismos somos como frágiles vasijas de barro que contienen este gran tesoro.[b] Esto deja bien claro que nuestro gran poder proviene de Dios, no de nosotros mismos.¨

Entonces podemos estar de acuerdo que para ser salvos no podemos considerar el hecho de que tenemos que añadir obras a nuestra fe; porque si fuera así nuestra salvación no dependiera de CRISTO solamente, sino que dependiera de CRISTO más nosotros y la gloria fuera compartida.

Entonces la pregunta es: ¿Qué quiso decir Santiago en todo esto?

Para poder entender no podemos dejar de ver en contexto de que Santiago está hablando. Venimos hablando desde el Cap. 1: 26 – 27 acerca del sacrificio por los que están en una situación peor que la nuestra; luego en el Cap. 2 vemos que no debemos hacer acepción de personas, sino que debemos amar al prójimo y que el que hace acepción de personas está pecando y transgresor de la ley.

Todavía Santiago sigue hablando de lo mismo. ¿Cómo podemos verlo? Porque aun en el

5. 15 nos dice: ¨Y si un hermano o una hermana están desnudos, y tienen necesidad del mantenimiento de cada día, y alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y saciaos, pero no les dais las cosas que son necesarias para el cuerpo, ¿de qué aprovecha?¨

Santiago NO está tratando de enseñar que para ser salvos tenemos que añadirle a la fe en CRISTO mis obras; sino que está enseñando que si yo digo tener fe en CRISTO, pero veo a un hermano en necesidad y lo único que hago es predicar mi fe y le digo: DIOS te bendiga; DE QUÉ NOS SIRVE LA FE.

Esto es un punto importante porque de alguna manera muchas veces cuando entramos en este argumento perdemos de perspectiva el mensaje central de esta Escritura; el mensaje central no era el argumento de la fe y las obras.

Sino que el mensaje central de la Escritura era el escribir a un grupo de personas dispersas que estaban pasando necesidad que no se olvidaran de amar al prójimo y ayudar al prójimo en el proceso en el que estaban pasando; que la situación que estaban pasando:

• No es una excusa para no gozarse en el SEÑOR.
• No es una razón para sucumbir a la tentación.
• Nos debe llevar a ser hacedores de la Palabra.
• No es una excusa para no ayudar al prójimo y hacer acepción de personas.

Gálatas 5:1-6

Pablo está hablando a los Gálatas y les está diciendo que se mantengan firmes en la libertad de CRISTO, que no regresen a la esclavitud de la ley; porque si lo hacen se desligan de CRISTO buscando justificarse por la ley; pero en el v. 6 dice que “Lo importante es la fe que se expresa por medio del amor”.

El resultado de nuestra fe, tiene que ser el amor; (por eso es que como Iglesia estoy tan interesado en que nos convirtamos en una Iglesia que Hace Discípulos) porque el resultado de nuestra fe, tiene que ser el amor.

Esto es lo mismo que está diciendo Santiago en los v. 15 – 17; si el resultado de tu fe en CRISTO JESÚS no es el que se manifieste por medio de ti el amor de CRISTO entonces tu fe es muerta en sí misma; no hay evidencia de vida de tu fe.

Muchas personas hoy día piensan que el cristianismo trata de el ir a la Iglesia, ponchar la tarjeta de DIOS y no tener que hacer absolutamente nada más; la realidad es que para ser salvos no tuvimos que hacer nada; pero el resultado de nuestra salvación debe ser el amor a DIOS y al prójimo; este es el argumento de Santiago; que no podemos decir que tenemos fe; si no la estamos manifestando en amor.

Mateo 7: 15 – 20

En el Sermón del Monte CRISTO lo explicó aquí diciendo: Hay falsos profetas que se visten de ovejas pero son lobos; pero la apariencia de cristiano no es lo que hace a un cristiano; por eso todo árbol que no da buen fruto es cortado y echado al fuego;

¨Así que por sus frutos los conoceréis¨.

Inclusive cuando leemos Mateo 7: 21 – 23 nos damos cuenta que muchas personas vendrán hablando de las grandes cosas que hicieron y JESÚS les contesta:

¨Apartaos de mí hacedores de maldad; nunca los conocí¨

¿Qué está diciendo Santiago? Muéstrame tus frutos; pero no es tus frutos de grandeza, sino tus frutos en las vidas de los demás; tus frutos en la inversión en el prójimo.

Este concepto lo volvemos a ver en Mateo 25: 31 – 46 donde nos dice que los de la izquierda que van al castigo eterno; no fue porque cometieron pecados; no fue porque cometieron errores; sino porque vivieron para ellos y no para el prójimo. Mientras a los de la derecha; porque entraron a la vida eterna; no fue porque oraron 5 horas diarias, porque se conocieron toda la teología, porque poncharon la tarjeta de DIOS, sino que fue porque no les importó sacrificar sus vidas para dar a conocer el amor del PADRE a otros.

SI ERES SALVO ES PORQUE CRISTO TE HIZO SALVO; SI TE HAS MANTENIDO LIBRE DE LO QUE TE ATORMENTABA ANTES ES POR LA GRACIA DE DIOS; SI CONOCES TODA LA TEOLOGÍA NECESARIA ES PORQUE DIOS EN SU MISERICORDIA TE HA DADO LA OPORTUNIDAD DE CONOCERLA; SI ERES UNA PERSONA DE ORACIÓN ES PORQUE DIOS HA PUESTO ESA PASIÓN EN TI; PERO SI TODO ESO NO SE TRADUCE EN AMOR POR EL PRÓJIMO; SI TODO ESO NO TE MUEVE A AMAR AL PRÓJIMO; TU FE ES IGUAL QUE MUERTA.

Juan 15:1-6

Lo que CRISTO mismo está diciendo que nos identifica con que tenemos vida en ÉL es que llevemos fruto, porque el que llevemos fruto no tiene nada que ver con nuestras habilidades, conocimiento, talentos, intelecto, sabiduría, inteligencia, sino que el llevar fruto depende del que estemos en ÉL y ÉL en nosotros. El llevar fruto es la evidencia de que nuestra fe en CRISTO está viva.

CONCLUSIÓN

Santiago 20:21-26

Por último Santiago hace dos ilustraciones para enseñar esto. El primero nos habla de cómo Abraham le creyó a DIOS; y nos explica en los v. 20 - 23 que cuando DIOS le pidió a Abraham que sacrificara a su hijo, la fe actuó, porque le creyó a DIOS, confió en DIOS hasta el final.

Pero imagínese si Abraham se hubiese quedado en su casa hablando con Sara y le dijera: Sara DIOS me pidió que sacrificara a nuestro hijo Isaac, así que algún día lo voy a hacer, no sé cuándo porque tengo que cuidar a mis camellos, pero cuando pueda voy a subir al monte y sacrificaré a Isaac. Pero Sara yo confío en que DIOS nos va a guardar en el proceso y que él se proveerá de sacrificio.

¿Fuera eso fe? Si fuera fe; pero sería una fe muerta, porque para que sea una fe viva tuvo que Abraham subir y estar dispuesto a tomar a Isaac y amarrarlo, buscar leña, ponerlo sobre el altar de piedra, sacar su cuchillo y estar dispuesto a sacrificarlo, de lo contrario de nada serviría el que él solo supiera que DIOS quería que sacrificara a Isaac, eso hubiese sido una fe muerta.

Por el otro lado en la otra ilustración nos habla de Rahab. ¿Tenía Rahab una base teológica; tenía Rahab una experiencia con DIOS? No y No. ¿Qué tuvo Rahab? Una fe ciega que la llevó a hacer obras que fueron con el bien del prójimo en mente y eso le fue contado como fe.

El deseo de DIOS es que nuestra fe en CRISTO se manifieste en amor al prójimo, lo que significa que ese compañero de trabajo, ese familiar, ese amigo, esa persona en necesidad eres tú la persona que DIOS puso para manifestarle el amor de CRISTO, de lo contrario tu fe y mi fe es muerta.

Avivemos la fe, mostrando nuestro amor al prójimo, avivemos la fe amando al prójimo, avivemos la fe, bendiciendo al prójimo, avivemos la fe llevando mucho fruto, avivemos la fe Haciendo Discípulos para Hacer la Diferencia.

NO HAY NADA MEJOR QUE SER CRISTIANO