Vida Victoriosa 10

El Poder De La Integridad

By Jonathan Hencker, Pastor Ejectuvio, November 07, 2019

INTRODUCCIÓN

En cantidad de ocasiones vemos personas que critican a la Iglesia Cristiana y les llaman hipócritas, pero tendríamos que preguntarnos: ¿cabe la posibilidad de que nosotros mismos hayamos sido responsables de esto?. Cuando decimos que Dios nos ha salvado, alcanzado, ministrado, transformado y cambiado, la gente definitivamente espera ver algo diferente en nosotros. En algunas ocasiones no lo hacemos y ven a muchos ser variables, un dia estas de una manera y otro dia de otra. Así, podemos llegar a confundir a las personas que están a nuestro alrededor. Pero en realidad eso no es lo peor; lo peor es que afectamos el Evangelio y limitamos la oportunidad para que esas personas también conozcan a Cristo.

Si algo debemos esperar de los que nos hacemos llamar hijos de Dios, es INTEGRIDAD. La palabra integridad o íntegro en hebreo significa: intacto, entero, de conducta intachable, no se deja alcanzar por el mal, es puro y no se deja contaminar. En griego la palabra significa: recto, honesto, que cumple con sus obligaciones. Y estas cualidades son las que todos esperan de nosotros los que tenemos a Cristo. Romanos 8: 19 “Pues toda la creación espera con anhelo el día futuro en que Dios revelará quiénes son verdaderamente sus hijos.” Por esta razón nuestra integridad es vital, porque nosotros somos los que tenemos que ser un ejemplo al mundo.

Efesios 1: 4 “Incluso antes de haber hecho el mundo, Dios nos amó y nos eligió en Cristo para que seamos santos e intachables a sus ojos.” Una de las formas en que los cristianos hoy día faltan a su integridad es a través de las redes sociales.

1 Corintios 12:22-26 “ De hecho, algunas partes del cuerpo que parecieran las más débiles y menos importantes, en realidad, son las más necesarias. 23 Y las partes que consideramos menos honorables son las que vestimos con más esmero. Así que protegemos con mucho cuidado esas partes que no deberían verse, 24 mientras que las partes más honorables no precisan esa atención especial. Por eso Dios ha formado el cuerpo de tal manera que se les dé más honor y cuidado a esas partes que tienen menos dignidad. 25 Esto hace que haya armonía entre los miembros a fin de que los miembros se preocupen los unos por los otros. 26 Si una parte sufre, las demás partes sufren con ella y, si a una parte se le da honra, todas las partes se alegran.

MENSAJE

Santiago 4: 1 ¨¿Qué es lo que causa las disputas y las peleas entre ustedes? ¿Acaso no surgen de los malos deseos que combaten en su interior?¨

La verdadera razón por lo que los hermanos pelean entre sí, por la que discuten y contienden es por:

  1. Envidia (v.2);
  2. Falta de intimidad con Dios (v.2);
  3. Malas intenciones (v.3);
  4. Han adoptado conceptos del mundo (v.5);
  5. Orgullo (v.6).

Inclusive enseña que la manera de evitar y combatir esto que es tan dañino al Reino es:

  1. Humillarse (v. 7);
  2. Resistir al diablo (v.7);
  3. Acercarnos a Dios (v. 8);
  4. Purificar el corazón (v.8);
  5. Arrepentirnos (v.9).

Lo cierto es que cuando hay contiendas entre hermanos esto afecta en gran manera el cuerpo de Cristo. Así como los discípulos y todos los personajes de la Biblia pasaron por contiendas lo importante es que Dios nos ha dado las herramientas para evitarlas o resolverlas.

Mateo 18: 15 – 20. 15 »Si un creyente[a] peca contra ti,[b] háblale en privado y hazle ver su falta. Si te escucha y confiesa el pecado, has recuperado a esa persona; 16 pero si no te hace caso, toma a uno o dos más contigo y vuelve a hablarle, para que los dos o tres testigos puedan confirmar todo lo que digas. 17 Si aun así la persona se niega a escuchar, lleva el caso ante la iglesia. Luego, si la persona no acepta la decisión de la iglesia, trata a esa persona como a un pagano o como a un corrupto cobrador de impuestos. 18 »Les digo la verdad, todo lo que prohíban[c] en la tierra será prohibido en el cielo, y todo lo que permitan[d] en la tierra será permitido en el cielo. 19 »También les digo lo siguiente: si dos de ustedes se ponen de acuerdo aquí en la tierra con respecto a cualquier cosa que pidan, mi Padre que está en el cielo la hará. 20 Pues donde se reúnen dos o tres en mi nombre, yo estoy allí entre ellos.

Si nosotros hiciéramos lo que dice la Palabra, no solo que resolveremos nuestros conflictos y contiendas de una forma más efectiva, sino que guardaremos nuestra integridad. La integridad no se pierde porque expresamos nuestro enojo ante el dolor o la injusticia, la integridad se pierde cuando nos dejamos alcanzar por el mal o contaminar a causa del dolor o la injusticia.

EL EJEMPLO DE DAVID

Luego de David haber peleado contra Goliat, liberado al pueblo de la amenaza del gigante, luego de haberle servido al rey, ahora tuvo que huir por una injusticia; porque ahora Saúl lo buscaba para matarlo; esto llegó a tal punto que nos dice 1 Samuel 22: 18 – 19 que Saúl ordenó que mataran a 85 sacerdotes del Señor y que mataran a sus familias, hombres, mujeres, niños y aun recién nacidos; todo por haber ayudado a David. La maldad de Saúl había llegado a tal punto que cualquier persona pensaría que debería morir.

Sin embargo en 2 ocasiones una en 1 Samuel 24 y la segunda en 1 Samuel 26 David tuvo la oportunidad de matar a Saúl sin que Saúl ni nadie se hubiese dado cuenta.

En la primera ocasión cuando David confrontó a Saúl probándole que tuvo la oportunidad de matarlo; él le dijo en

1 Samuel 24: 12 – 15 ¨Que el Señor juzgue entre nosotros. Tal vez el Señor lo castigue por lo que intenta hacer, pero yo nunca le haré daño. 13 Como dice el antiguo proverbio: “De la gente malvada, provienen las malas acciones”. Así que puede estar seguro de que nunca le haré daño. 14 De todas formas, ¿a quién trata de atrapar el rey de Israel? ¿Debería pasar tiempo persiguiendo a alguien que no vale más que un perro muerto o una sola pulga? 15 Por lo tanto, que el Señor juzgue quién de nosotros tiene la razón y que castigue al culpable. ¡Él es mi defensor y me rescatará de su poder!¨.

En esta ocasión David dice algunas cosas que son claves en cuanto a la integridad; él dice:

  1. Que el Señor sea quien juzgue entre nosotros;
  2. Yo nunca le haré daño;
  3. De la gente malvada, provienen las malas acciones;
  4. Dios es mi defensor.

La segunda vez que David tuvo la oportunidad de matar a Saúl y lo confrontó usó palabras y términos similares; pero una característica de David en cuanto a su integridad cuando tuvo la oportunidad de matar a Saúl es que aunque Saúl le había hecho lo suficiente como para David justificar el matarlo, aun así David se resistía y le llamaba ¨el ungido de Jehová¨.

David no temía a Saúl, David temía a Dios, David no quería hacer algo que llegara a ofender a Dios, él prefería que fuera Dios quien lo juzgará; esto es una cualidad que tiene que verse dentro del pueblo de Dios, aún hoy más que nunca que tenemos una urgencia en nuestra sociedad Cristo sea exaltado.

David pudo haber justificado el matar a Saúl, pero su integridad no le permitió dejarse vencer por el mal; David no permitió que el mal le contamina su corazón. Cuando nos vengamos de palabras, acciones directas o indirectas, estamos siendo nosotros quienes estamos ejerciendo justicia y eso nos afecta nuestra integridad, porque solo puede hacer justicia el que es verdaderamente justo.

Romanos 12: 14 – 21 “14 Bendigan a quienes los persiguen. No los maldigan, sino pídanle a Dios en oración que los bendiga. 15 Alégrense con los que están alegres y lloren con los que lloran. 16 Vivan en armonía unos con otros. No sean tan orgullosos como para no disfrutar de la compañía de la gente común. ¡Y no piensen que lo saben todo! 17 Nunca devuelvan a nadie mal por mal. Compórtense de tal manera que todo el mundo vea que ustedes son personas honradas. 18 Hagan todo lo posible por vivir en paz con todos. 19 Queridos amigos, nunca tomen venganza. Dejen que se encargue la justa ira de Dios. Pues dicen las Escrituras: «Yo tomaré venganza; yo les pagaré lo que se merecen», dice el Señor. 20 En cambio, «Si tus enemigos tienen hambre, dales de comer. Si tienen sed, dales de beber. Al hacer eso, amontonarás carbones encendidos de vergüenza sobre su cabeza» 21 No dejen que el mal los venza, más bien venzan el mal haciendo el bien.”

David conocía que su victoria no tenía que estar opacada por la falta de integridad, porque su victoria venia del Señor y no de él mismo.

Cuando nuestra victoria viene a expensas de dañar la reputación de gente, de venganza, de ira, de contienda, Dios no está en ella, porque todo eso significa que nos dejamos dominar del mal Nuestra victoria siempre será segura cuando en el proceso buscamos honrar a Dios guardando nuestra integridad.

El Reino nos llama a la integridad, a mantener nuestros corazones y pensamientos intactos ante la oposición y la maldad, a que no permitamos que el mal nos venza ni nos contamine aún cuando nos ha dolido o dañado; los Cristianos debemos ser íntegros aunque nos duela, porque es la manera en que le comunicamos el Evangelio de Cristo.

NO HAY NADA MEJOR QUE SER CRISTIANO