Sin-Verguenza 4

Volviendo Al Padre

By Rcichard Martinez, Pastor Principal, January 26, 2020

INTRODUCCIÓN

Muchas personas cuando se les habla de Jesús y del por qué es importante entregar nuestras vidas a Cristo, inmediatamente piensan en la religión; otros piensan en cómo es imposible que algo que tenga que ver con Cristo de verdad, tenga la oportunidad de ayudarle a cambiar sus vidas.

Pero la realidad es que lo único que tendría que hacer es hablar con algunas personas a su alrededor y cada uno tendrá una historia que contar, cada uno podrá contarles de cómo eran sus vidas antes y después de Jesús y se identificaría y hasta se asombraría con las historias que escucharía.

Hay personas que piensan que los Cristianos son tontos, que se reúnen en la Iglesia, que están hipnotizados, que están manipulados, que están engañados y eso es una manera de ver las cosas.

O puede ser, que la razón por la que los Cristianos se reúnen semana tras semana, sirven a Dios en la Iglesia, enseñan a los niños, dan de sus ingresos, traen a sus hijos a la Iglesia, buscan hablarle a otros de Jesús, cantan canciones a Dios, escuchan mensajes, leen la Biblia, oran a Dios, buscan vivir una vida correcta; es porque han descubierto algo que ha revolucionado sus vidas, posiblemente han encontrado algo que ha llenado el vacío de sus corazones como nada antes lo había podido lograr.

Entre tantas personas inteligentes, independientes, sabias, etc. que tenemos aquí, creo que la segunda es más lógica que la primera. Por eso es que todos ustedes están aquí:

  • Porque ya han tenido esa experiencia maravillosa con Jesús.
  • Porque alguien está ansioso porque usted tenga esa experiencia maravillosa con Jesús.

Lo cierto es que es Dios Quien está más interesado, que usted tenga una experiencia con Su amor impresionante, que es capaz de cambiar todas las cosas.

MENSAJE

En Los Hombros Del Padre

En Lucas 15 un grupo llamado los fariseos, criticaron a Jesús porque se juntaba y comía con pecadores y gente de mala fama. Cuando Jesús los escuchó les contó 3 historias, o ilustraciones.

En la primera historia en los v. 4 – 7 Jesús les habló de un hombre que perdió una oveja y cómo ese hombre dejó a todas las demás ovejas y salió a buscar la oveja que se perdió hasta que la encontró y cuando la encontró la trajo cargando en sus propios hombros y la llevó nuevamente a casa.

Y nos dice en el v. 6 que cuando el pastor llegó con la oveja perdida a su casa, llamó a sus amigos y vecinos y les pedía que se alegraran con él; porque encontró la oveja que estaba perdida. Luego explica que de la misma manera, hay alegría en el cielo cuando un pecador se arrepiente.

El ejemplo de la oveja representa cómo las decisiones que esta oveja fue tomando en su vida, la llevaron poco a poco a separarse del cuidado del pastor, de la cobertura del pastor; hasta que un día cuando se dio cuenta se encontraba perdida, sin saber cómo hacer.

Posiblemente la oveja fue tomando decisiones que pensaba que podría encontrar fácilmente el camino nuevamente al Padre, pero según fueron pasando los días, los años, de repente se encontró perdida, sin dirección y sin saber cómo tomar el control de su vida nuevamente y volver al Padre.

Jesús está ilustrando a los fariseos que estas personas que ellos estaban criticando eran como esa oveja, que

muchas personas no llegaron a donde llegaron porque tenían un corazón malvado, sino que porque fueron tomando una decisión y luego otra y otra hasta el punto que cuando quisieron cambiar sus vidas, salir de la condición que se encontraban, ya no sabían cómo.

Por eso, Él explica que el Pastor fue tras la oveja y lo ilustra como que de repente en el peor momento, en la peor condición de la oveja, cuando la oveja pensaba que ya no había solución, de repente sintió una mano que la tomó fuertemente y la levantó y para cuando se percató, estaba en los hombros del Padre y llegando a la casa del Padre, siendo sanada, rescatada y amada por el Padre.

Así es que sucede con muchas personas; una persona no despierta de repente un día y decide ser alcohólico, o drogadicto, o abusador, o adultero, o lo que le quiera poner. Sino que por lo general, todo comienza con una decisión que lleva a la otra y luego a la otra y para cuando nos damos cuenta es más fácil continuar viviendo en esa condición, que tomar una decisión de cambiar.

Pero muchas personas que están aquí les contarían que en el peor momento de sus vidas, cuando sentían que sus vidas ya no tenían salida, cuando sentían que ya no sabían cómo cambiar, cuando ya habían tratado tantas cosas que no habían funcionado y habían perdido toda esperanza; cuando menos se lo pensaron un día Cristo apareció en sus vidas y les rescató.

Algunos hasta le contarían que en el día en que pensaron quitarse la vida, que pensaron dejar a su familia, que pensaron hacer el peor error de sus vidas, ahí fue que Cristo llegó a sus vidas y les tomó, les levantó, les salvó y les trajo a casa.

La Búsqueda Del Padre

En el segundo ejemplo en los v. 8 – 10 Jesús habla de una mujer que tenía 10 monedas de plata y de repente perdió una moneda en su casa. Dice que esa mujer barrió la casa y no descansó hasta que encontró la moneda y cuando la encontró; también llamó a sus amigos y vecinos y les dijo:

Alégrense conmigo porque encontré mi moneda perdida. Luego dice Jesús: que de la misma manera hay alegría en presencia de los ángeles de Dios cuando un pecador se arrepiente.

Esta ilustración de la moneda perdida, Jesús está explicándole a los fariseos que posiblemente no fueron las decisiones que las personas tomaron que los llevó a esa condición de mala fama.

Sino que posiblemente lo que los llevó a esa condición fue la forma en que la vida pudo haberlos golpeado; que posiblemente las personas llegaron a esa condición porque enfrentaron tal dolor y sufrimientos en la vida que ahora se encontraban sin esperanza de poder escapar de su condición.

Porque en ocasiones lo que nos ha llevado a separarnos de Jesús no fueron nuestras decisiones, sino en ocasiones han sido las decisiones que las personas han tomado por ellos, que les han afectado tan drásticamente que ahora se les dificulta creer en el amor del Padre.

Jesús ilustra la moneda como las personas que la vida ha golpeado, que se sienten que no hay amor ni esperanza, que no saben ni pueden creer;

Jesús explica cómo la mujer continúa barriendo y volteando la casa hasta que la encuentra, porque la moneda es valiosa para ella.

Él les está explicando, la mujer tiene 10 monedas y cualquier persona pudiera decir: pues ni modo me quedan 9, pero no el Padre. Él explica cómo esas personas que la vida ha golpeado y sienten que no tienen valor, sí son valiosas para el Padre y cómo el Padre no descansará hasta encontrarlas y demostrarles que la vida no les puede robar su valor, porque son valiosas para Él.

Así hay personas aquí, personas que fueron heridas, lastimadas, abandonadas; que sienten que ya no tienen valor y el Padre, está volteando la casa, está haciendo lo necesario porque te dejes encontrar para demostrarte que posiblemente para la persona que te dañó no valías mucho, pero para el Creador del Universo, para el Dios Todopoderoso, para Él sí eres muy valioso.

Para una niña que fue violada, no valía mucho para el violador; para un hijo que fue abandonado, no valía mucho para el que lo abandonó; para un cónyugue que fue traicionado, no valía mucho para quien le traicionó; para una persona que fue maltratada, no valía mucho para quien le maltrató; pero

es nuestra decisión si vamos adquirir nuestro valor de quien nos dañó o de quién dio Su vida en la Cruz del Calvario, porque para Él sí somos muy valiosos.

Si pregunta a su alrededor algunos le contarán cómo ellos también se sentían de la misma manera, cómo ellos atravesaron situaciones donde se sentían que habían perdido su valor; pero también le contarán de cómo Jesús los buscó hasta que los encontró y les ha mostrado con Su amor, el gran valor que tenemos para Él y que hoy viven mucho más bendecidos que lo que se podían imaginar.

Y es que

nada, ni nadie puede robarte el valor que el Padre ha determinado que tengas.

Porque tu valor no lo determina la gente, ni las experiencias, ni tan siquiera te lo puedes dar tú; tu valor lo determina el Padre y Él determinó que eres muy valioso.

Sólo imagine si Dios nos ama y nos valora, que Cristo por amor soportó las humillaciones de la gente, los golpes terribles que le proporcionaron los líderes religiosos; soportó que Le escupieran la cara, que Le pusieran una corona de espina que traspasara su cráneo, que Lo azotaran hasta destrozar toda Su carne y cuerpo; que Él mismo cargó Su Cruz, para que luego le clavaran las manos a ella.

Se imagina lo que se siente estar sostenido por clavos en una Cruz, estarse asfixiando mientras trataba de tomar aire y las heridas en Su cuerpo frotando aquella Cruz; mientras sentía un dolor inmenso de cabeza por las espinas enterradas en Su cráneo y a la vez siendo motivo de burla de la gente, que mientras Él sufría de dolor se reían y burlaban.

El pensar que todo esto Él Lo atravesó por ti y por mí, Lo atravesó para salvarnos y mostrarnos cuánto nos ama y cuán valiosos somos para Él.

CONCLUSIÓN

La Espera Del Padre

Pero en este último ejemplo que Jesús da en los v. 11 – 31 fue diferente, Jesús habla de un padre que tenía 2 hijos y uno de ellos le pidió su parte de la herencia para abandonar la casa del padre, porque a diferencia de los primeros dos, éste último hijo sabía lo que hacía, él tomó una decisión consciente que no quería nada con el padre y que quería irse lejos de la casa del padre.

Nos explica que un tiempo después el hijo comenzó a vivir una vida desenfrenada, donde derrochó todo hasta estarse muriendo de hambre y llevó a vivir en la condición más denigrante de su vida.

Pero lo importante de la historia no son las consecuencias que atravesó por sus decisiones, sino que lo más impresionante de la historia es el amor impresionante de Dios por nosotros.

Porque dice en los v. 17 – 18 que cuando este hijo estaba en el peor estado de su vida, cuando estaba en la condición más deplorable de su vida; Dios mismo hizo a este hijo entrar en razón. Dicen los

  1. 17 – 18: ¨Cuando finalmente entró en razón, se dijo a sí mismo: “En casa, hasta los jornaleros tienen comida de sobra, ¡y aquí estoy yo, muriéndome de hambre! Volveré a la casa de mi padre y le diré: ‘Padre, he pecado contra el cielo y contra ti.¨

Me fascina esta expresión que dice: Cuando finalmente, porque pareciera que Dios estuvo insistiendo e insistiendo hasta que finalmente el joven entró en razón, hasta que finalmente este hijo se rindió y decidió regresar a la casa de su padre.

En otras palabras, Jesús Les explica que:

aún los que no quieren nada con Dios, los que deciden rechazar a Dios, negar a Dios y están viviendo las consecuencias de sus decisiones; también ellos tienen esperanza, también Dios Les ama y también Dios quiere restaurarlos.

Por eso, este hijo cuando regresó a la casa del padre nos dice el v. 21 que le dijo al Padre:

¨Padre he pecado contra el cielo y contra ti, y ya no soy digno que me llamen tu hijo¨.

Él esperaba que el Padre lo iba a rechazar, él esperaba que el Padre lo iba a hacer uno de sus jornaleros; su conciencia lo estaba matando al pensar que no merecía nada del padre; pero lo que recibió del padre fue todo lo contrario; porque nos dice el

  1. 20: ¨Entonces regresó a la casa de su padre, y cuando todavía estaba lejos, su padre lo vio llegar. Lleno de amor y de compasión, corrió hacia su hijo, lo abrazó y lo besó¨.

Esto me ministra, porque enseña que el padre estaba tan desesperado porque el hijo un día regresara que estaba esperándolo. Al punto tal, que nos dice el v. 20 también que cuando el padre lo vio llegar dice:

Lleno de amor y compasión, corrió hacia su hijo, lo abrazó y lo besó.

Mientras el hijo esperaba ser rechazado por el padre, ser humillado por el padre, castigado por el padre, lo que recibió del padre fue amor, compasión, afecto y afirmación. Y mientras el hijo buscaba ser rechazado por el padre, mientras esperaba ser condenado por el padre; el padre estaba haciendo todos los arreglos para una fiesta.

La forma en la que yo me lo imagino es por un lado el hijo tratando de decirle al padre que no merecía nada de él y por el otro lado el padre planeando la celebración; mientras por un lado el hijo lleno de culpa y por el otro el padre lleno de amor, por un lado el hijo lleno de remordimiento y por el otro lado el padre lleno de gozo y alegría; porque su hijo que estaba muerto ahora vive y que estaba perdido había sido encontrado.

Esa fue la experiencia que yo tuve cuando vine a Él y me rendí a Él; Él me encontró y me alcanzó el mismo día que le pedí el divorcio a mi esposa; ese día que iba camino a la casa de mi amante para decirle que por fin mi esposa me daría el divorcio; cuando de repente Jesús llegó a mi vida, me amó y me hizo entrar en razón, me alcanzó y me mostró un amor que jamás he podido negar.

Yo vine a Él lleno de adulterio, lleno de drogadicción, de alcoholismo, de orgullo y soberbia y en vez de rechazarme, fue todo lo contrario; cuando Él me vio llegar, corrió hacia mi, me abrazó, me besó, me amó, y hasta el día de hoy no me ha soltado y no me soltará jamás.

Ese día hubo una gran fiesta en el cielo, pero no sólo en el cielo; sino que hubo una gran fiesta en la casa de los Martínez, porque ni mi vida, ni mi familia hemos sido los mismos desde ese día.

Lo mismo Dios quiere hacer con cada persona aquí, sea que estés caminando lejos de Él; porque fuiste tomando decisiones en tu vida que no sabes cómo llegaste a donde te encuentras ahora, o haya sido que la vida te golpeó a tal punto que el dolor te llevó a alejarte de Dios, o haya sido que tomaste la decisión de que no querías nada con Dios; no importa: El Padre te está esperando.

El Padre te ha estado esperando y si tú das el primer paso; Él da todos los demás.

Puedes venir así como estás, con tus dudas, con tus pecados, con tu dolor, con tu angustia; sólo ven al Padre, porque el Padre te ha estado esperando y quiere darte una Vida Nueva, quiere traerte de nuevo a casa, devolverte el valor que has perdido y llenarte del amor que sólo Él puede dar.

El Padre quiere salvarte, restaurarte, pero sobretodo amarte hasta que vivas para declarar que:

NO HAY NADA MEJOR QUE SER CRISTIANO