INTRODUCCIÓN La Fe sí es muy rara porque exige que accesemos áreas que son incómodas para nosotros y nos exige ser perseverantes aun cuando queremos rendirnos. Por esa razón titulamos este mensaje: Renunciando a Renunciar. Porque si queremos vencer, necesitamos ser perseverantes y renunciar al deseo de renunciar. MENSAJE Importancia De La Perseverancia Hay errores que cometemos en relación a como miramos la fe y posiblemente usted se identificará con estos errores. Por ejemplo. 1. Pensamos que la fe es la forma en que salimos de la crisis sin haber sufrido. • La realidad es que la fe es mucho mas que lo que nos ayuda a no sufrir; la fe es lo que nos mantiene avanzando cuando queremos rendirnos, nos mantiene de pie aunque seamos golpeados, nos mantiene creyendo aun cuando estamos sufriendo. En Hebreos 12: 1 luego que el escritor explica todo lo que atravesaron las personas que guardaron la fe, él dijo: ¨Por lo tanto, ya que estamos rodeados por una enorme multitud de testigos de la vida de fe, quitémonos todo peso que nos impida correr, especialmente el pecado que tan fácilmente nos hace tropezar. Y corramos con perseverancia la carrera que Dios nos ha puesto por delante.¨ Las personas que menciona Hebreos 11 no fueron reconocidos por como escaparon el sufrimiento, sino que fueron reconocidos por cómo perseveraron en medio de el. Muchas personas cuando leen Hebroes 12: 1 se enfocan en la parte del pecado, pero a mi me llama mucho la atención la parte en la que él explica que corramos con perseverancia. La perseverancia es una de las cosas que tenemos que desarrollar si no queremos renunciar hasta llegar a la meta que Dios ha determinado para nuestras. 2. NO nos preparamos para una soportar y resistir el dolor, nos preparamos pensando que todo pasará rápido. . La mayoría de las personas pueden soportar un problema, pero las personas no renuncian por un problema; las personas renuncian cuando el problema dura más tiempo de lo que esperaban. La mayoría de las personas que renuncian a su matrimonio, no renuncian porque tuvieron un problema, sino porque a través del tiempo se van acumulando muchos problemas. La mayoría de los Pastores que renuncian al Ministerio, no es porque la Iglesia se dividió, sino es por la acumulación de tantas pruebas, por tanto tiempo. Una persona que dejó el alcohol y vuelve al alcohol, que dejó las drogas y vuelve a las drogas, no es porque quieren vivir así; es que con el pasar del tiempo se cansaron de luchar, de combatir con la ansiedad y renuncian a la libertad. A lo que quiero llegar es que las personas cuando se rinden, no se rinden por un evento que sucedió en sus vidas, se rinden cuando ese evento dejó de ser un evento para convertirse en una situación que dura más tiempo del que ellos esperaban. 3. Esperar un golpe de suerte; que suceda algo de la nada. Por lo general la vida no es así, la vida requiere perseverancia en todo lo que vivimos; el matrimonio requiere perseverancia, la libertad requiere perseverancia, el Ministerio requiere perseverancia; todo lo que vale la pena en la vida requiere perseverancia, no golpes de suerte. La mayoría de las personas exitosas en la vida sea en el matrimonio, en la familia, en el Ministerio, cuando les pregunta le cuentan que para tener éxito requiere perseverancia. En esta semana nuestro hermano Pedro Peña falleció; luego de cumplir 70 años de casado con su esposa María Peña. Cuando hablaba con la hermana Peña, hablábamos del matrimonio y en todo lo que ella me contaba, se puede resumir que ellos duraron 70 años de casados; no porque no tuvieron problemas, no porque no tuvieron conflictos o contratiempos, sino porque se amaron y el amor los llevó a perseverar. Todo lo que vale en la vida, exige perseverancia. La palabra “perseverancia” en Hebreos 12: 1 es hypomone que significa: el poder de soportar dificultades por la fuerza que se produce internamente. La perseverancia no es algo que sucede por accidente, es un estilo de vida. Lo que significa que cuando decidimos ser perseverantes tenemos que entender que no es algo que desarrollamos para un evento temporal, sino un estilo de vida que desarrollamos para lograr el propósito de Dios en nuestras vidas, para llegar a la meta y victoria. Renuncia a Renunciar Lo que nos lleva a que si queremos triunfar, salir victorioso, lograr la meta, cumplir el propósito tenemos que renunciar al deseo y la tentación de renunciar. Hebreos 12: 2 – 3 ¨ 2 Esto lo hacemos al fijar la mirada en Jesús, el Campeón que inicia y perfecciona nuestra fe. Debido al gozo que le esperaba, Jesús soportó la Cruz, sin importarle la vergüenza que ésta representaba. Ahora está sentado en el lugar de honor, junto al trono de Dios. 3 Piensen en toda la hostilidad que soportó por parte de pecadores, así no se cansarán ni se darán por vencidos¨. Aquí nos explica que por naturaleza, nosotros nos inclinaremos a darnos por vencido; cuando la situación se pone difícil nuestra naturaleza humana nos lleva a darnos por vencido, a huir, a rendirnos, a renunciar, a dejar todo tirado. ¿Qué sucede si ya internamente siento que no me quedan más fuerzas? ¿Si ya no quiero luchar más? ¿Si no soporto más y lo que quiero es rendirme? ¿Si ya no puedo más? Es muy común, que podamos llegar a sentirnos que no podemos más, que no queremos más. Porque en ocasiones la vida nos puede golpear tan fuerte que lo que queremos es rendirnos, lo que queremos es tirar la toalla, salirnos corriendo. Como le sucedió a la viuda de Sarepta en 1 Reyes 17 que cuando el profeta llegó a su casa, ya ella estaba resignada y prepararía su última cena para luego de eso dejarse morir; porque ya se había resignado a morir, ya ella se había cansado de luchar, pero Dios tenía otros planes. Y así le sucede a muchas personas en este tiempo que con todo lo que está sucediendo, con tantas malas noticias, donde quiera que van es un problema; para luego llegar a la casa, al negocio, al Ministerio, a la familia y tener que enfrentar más malas noticias, más conflictos, más problemas y se nos puede hacer fácil rendirnos, deprimirnos, renunciar, huir, etc. Hay personas que se sienten como si estuvieran sostenidos a una rama en un precipicio y están buscando la forma de sostenerse, pero cuando ya no tienes más fuerzas lo que generalmente sucede es que las personas se sueltan y se dejan caer al precipicio. El problema es que en ocasiones queremos depender de nuestras propias fuerzas, sabiduría, control, experiencias y esa es la razón por la que muchas personas se rinden; porque están dependiendo de ellos mismos para lo que ellos mismos no tienen el control. Por eso nos dicen los v. 2 – 3 que la manera en que renunciamos al deseo de renunciar es fijando la mirada en Jesús; porque Él es el Campeón que inicia y perfecciona nuestra fe. Lo que significa que nosotros perseveramos por la fe, porque nuestra fe no es producto de algo que fabricamos en nuestras fuerzas, sino que nuestra fe la inicia y la perfecciona Jesús en nosotros. En otras, así como sucedió con la viuda de Sarepta que Dios interrumpió sus planes de rendirse y en medio de la sequía y de la escasez le dio una nueva razón para vivir, así mismo Dios hace con nosotros, porque nos dice que es Jesús quien inicia y perfecciona la fe en nosotros; no somos nosotros, no es en nuestras fuerzas, es Jesús quien inicia y perfecciona la fe en nosotros. Y como dice que no sólo inició la fe en mí, sino que la perfecciona; que en griego es teleiotes, que significa: quien lo lleva hasta la culminación y hace que se cumpla. Yo me lo imagino a Jesús diciéndome: Vamos persevera sigue en la carrera, ya perfeccioné tu fe; vamos soporta que ya te capacité con más fe, ya te hice que escucharas un mensaje más; vamos abre la Biblia que te voy a enseñar una Palabra más; vamos, vamos ya te envié a alguien para que te de un consejo más; vamos que ya levantaron una oración más, tú puedes vamos ya puse a alguien más a interceder por ti; vamos persevera, vamos persevera, vamos que estás listo y no es en tus fuerzas, es en Mis fuerzas y ya Yo te impregné con todo lo que necesitas para perseverar, correr y terminar victorioso esta carrera de la fe. CONCLUSIÓN Renueva Tus Fuerzas Por eso es que más adelante nos dicen los v. 12 – 13 ¨ 12 Por lo tanto, renueven las fuerzas de sus manos cansadas y fortalezcan sus rodillas debilitadas. 13 Tracen un camino recto para sus pies, a fin de que los débiles y los cojos no caigan, sino que se fortalezcan.¨ Es normal estar cansado con tantas malas noticias, tantos contratiempos, tantas angustias, tantos sufrimientos; pero éste no es el tiempo de rendirnos, éste es el tiempo de renovar nuestras fuerzas, es tiempo de levantar las manos cansadas, es tiempo de fortalecer las rodillas debilitadas; es tiempo de que los débiles y los cojos no caigamos, sino que nos fortalezcamos en el Espíritu. Es tiempo de operar la fe que Jesús inicio y perfeccionó en nosotros que NO nos lleva a escapar de la prueba, sino que nos ayuda a perseverar en ella; que no nos lleva a NO llorar, sino a perseverar mientras nos secamos las lágrimas; NO nos lleva a vivir una vida sin conflictos, sino que nos lleva a alabar, servir, amar y confiar en Cristo en medio del dolor y la calamidad. Por eso es, que tenemos que perseverar en este tiempo, porque Dios aún no ha terminado con nosotros; Dios hará lo que ha dicho que hará, cumplirá lo que ha dicho que cumplirá, restaurará lo que ha determinado que restaurará y la pandemia no será un impedimento para Dios. Así que renueven las fuerzas de sus manos cansadas; fortalezcan sus rodillas debilitadas. 13 Tracen un camino recto para sus pies; …que los débiles y los cojos no caigan, sino que se fortalezcan.¨ Entiende que en este tiempo Dios quiere hacer algo nuevo en tu vida y en tu corazón, quiere darte una nueva razón para vivir; quiere fortalecerte, darte esperanza, darte una nueva oportunidad de vivir, quiere darte un gozo que jamás habías conocido; quiere sanarte, quiere darte una paz que jamás habías conocido y quiere salvarte para que tú veas cuánto te ama; por eso es que si en este día quieres experimentar lo que Dios es capaz de hacer en tu vida, escribe YO en este momento en los comentarios. Dios nos está llamando a perseverar, a creer por encima de lo que estamos viendo, accesar la fe que ya Él inició y perfeccionó en nosotros. Por eso es que cuando la viuda le dice a Elías, que se iba a hacer el último bocado de pan para dejarse morir, Elías le dijo en los v. 13 – 14: ¡No tengas miedo! Sigue adelante y haz exactamente lo que acabas de decir, pero primero cocina un poco de pan para mí. Luego, con lo que te sobre, prepara la comida para ti y tu hijo. 14 Pues el Señor, Dios de Israel dice: “Siempre habrá harina y aceite de oliva en tus recipientes… No era que Elías era inconsciente o insensible, era que Elías la estaba llevando a la viuda a accesar la fe que Dios ya había depositado en ella; Elías retó su fe, la llevó a accesar la fe con la que Dios ya la había capacitado y cuando ella así hizo, se cumplió lo que Dios le había declarado. Y esto es lo que Dios quiere hacer con nosotros, llevarnos a no desmayar, a no rendirnos, a perseverar, para que vivamos declarando que: NO HAY NADA MEJOR QUE SER CRISTIANO Más Acerca De Ser Perseverantes Si hay algo que hemos podido aprender en este tiempo es el ser perseverantes. Antes de la pandemia muchas personas vivían la vida de una forma muy ligera, tomando las decisiones que requirieran menos esfuerzo que proveyeran la más rápida satisfacción aunque eso significara que era una satisfacción superficial. Pero la persona perseverante tiene que estar tomando pequeñas decisiones diarias que acumulan grandes éxitos. La persona perseverante se enfoca en los cambios que él o ella tienen que hacer para llegar a la meta. La perseverancia trata de constantemente rechazar las decisiones que nos desvían de nuestro propósito y constantemente tomar las decisiones que nos acercan a Él. Nuestro estilo de vida diario determina el éxito que tendremos en la vida y en la realización de nuestras metas. Cuando sólo esperamos un golpe de suerte, es como una persona que nunca ha corrido en una carrera en su vida y esperar ganarla a la par de atletas entrenados, las estadísticas serían 1 en 100 millones. Así como lo son las estadísticas en cuanto a la suerte; no son confiables, son muy pobres, son una en millones; sin embargo, muchas personas continúan viviendo, soñando con una estadística de una en millones. Por ejemplo, las probabilidades de una persona ganarse la loto es 1 en 175 millones. Pero aún así, las personas siguen jugando con el sueño de alguna vez ganarse el premio. Cuando sería mejor hacer los cambios necesarios en la manera en la que vivimos, en cómo gastamos, en cómo invertimos, para así de esa manera vivir prósperos. Cada decisión que tomamos en la vida debe acercarnos más al propósito de Dios; por eso es que dice Hebreos 12: 1 quitémonos todo peso que nos impida correr, especialmente el pecado que tan fácilmente nos hace tropezar. Aquí habla de una decisión que nosotros tenemos que tomar, si queremos llegar a la meta. Por ejemplo en el Salmo 37: 1 - 7 nos da 7 cualidades del que persevera, él dice: ¨No te inquietes a causa de los malvados ni tengas envidia de los que hacen lo malo. 2 Pues como la hierba, pronto se desvanecen; como las flores de primavera, pronto se marchitan. 3 Confía en el Señor y haz el bien; entonces vivirás seguro en la tierra y prosperarás. 4 Deléitate en el Señor, y él te concederá los deseos de tu corazón. 5 Entrega al Señor todo lo que haces; confía en él, y él te ayudará. 6 Él hará resplandecer tu inocencia como el amanecer, y la justicia de tu causa brillará como el sol de mediodía. 7 Quédate quieto en la presencia del Señor, y espera con paciencia a que él actúe. No te inquietes por la gente mala que prospera, ni te preocupes por sus perversas maquinaciones.¨ No se inquieta. No se deja llevar por los demás. Confía en Dios. Se deleita en la ley de Dios. Lo que hace lo hace para agradar a Dios. Espera con paciencia. No vive preocupado. Estas cualidades son indispensables para el que persevera. Si nos fijamos ninguna de ellas, son grandes decisiones que nos ayuda a dar un golpe de suerte, sino que son pequeñas cualidades que desarrollamos en nuestro carácter que determina nuestro estilo de vida. Por ejemplo, cuando vemos un matrimonio que se restauró, decimos: wow que suerte tuvieron, pero nadie piensa a cuántas cosas ellos tuvieron que morir, cuántas cosas tuvieron que perdonar para ver el matrimonio restaurado. Vemos una persona que dejó alguna adicción y decimos: wow, mira que bien le va; pero no meditamos en cuántas tentaciones tuvo que soportar, cuántas lágrimas tuvo que derramar, cuántas ocasiones tuvo que resistir para llegar a donde está. El obstáculo de la perseverancia es algo que todos tenemos que sobrepasar porque si no sobrepasamos este primero, si no tomamos esta decisión de ser perseverantes, jamás llegaremos a la meta que Dios trazó para nosotros y fracasaremos antes de comenzar o nos rendiremos en el camino.