INTRODUCCION

En estos tiempos más que nunca tenemos que desarrollar una convicción de quien es Cristo; es por eso que queremos seguir siendo intencionales al hablar más de Jesús; necesitamos desarrollar la convicción de quienes somos para Cristo, tener una convicción del Evangelio, tenemos que vivir una vida genuinamente aferrada a Cristo, amándole, sirviendole, honrándole y alabándole.

MENSAJE

El Asunto es del Corazón

En Marcos 7 vemos a un grupo de fariseos y escribas que se acercan a Jesús y le cuestionan el que sus discípulos estuvieran comiendo sin lavarse las manos. Para los fariseos esto era una gran ofensa.

En el v. 6 Jesús les contesta:

¨ ¡Hipócritas! Isaías tenía razón cuando profetizó acerca de ustedes, porque escribió: Este pueblo me honra con sus labios, pero su corazón está lejos de mí.¨

Luego nos dice el v. 15 que Jesús llama a la multitud y les dice:

¨Lo que entra en el cuerpo no es lo que los contamina; ustedes se contaminan por lo que sale de su corazón¨.

Si analizamos la confrontación de Jesús hacia los fariseos, vemos que los exhorta a que a pesar de que podían hacer muchas cosas; honrar a Dios de labios o hacer cosas que parecían buenas; se habían olvidado de lo mas importante: de examinar sus corazones y eso los había llevado a olvidar a amar a Dios con todo su corazón. Luego les expresa a la multitud que era necesario examinar sus corazones porque la verdadera contaminación era la que salía del corazón.

La palabra corazón kardia significa: función interna de los pensamiento, de las decisiones, la voluntad, los comportamientos. Proverbios 4: 23

¨Sobre todas las cosas cuida tu corazón, porque este determina el rumbo de tu vida¨.

La palabra cuida significa: mantenlo a salvo, libre de contaminación o daño. Si no cuidamos, si no mantenemos a salvo y libre de contaminación nuestro corazón nos arriesgamos a afectar nuestra vida.

El corazón de los fariseos estaba endurecido, por la religión y eso los limitaba de poder ver la obra de Dios. Como enseña Mateo 13: 15 que dice:

¨Pues el corazón de este pueblo está endurecido, y sus oídos no pueden oír, y han cerrado los ojos, así que sus ojos no pueden ver, y sus oídos no pueden oír, y su corazón no puede entender, y no pueden volver a mí para que yo los sane¨

Un corazón endurecido siempre nos limitará, limita lo que Dios quiere y anhela hacer en nuestras vidas; porque hace que cerremos nuestros ojos y no podamos ver lo que Dios está haciendo en medio del proceso; hace que cerremos nuestros oídos y no escuchemos consejos, ni mucho menos la voz de Dios.

Hay diferentes formas en que se puede endurecer el corazón; por ejemplo: situaciones dolorosas; cuando una persona se cansa de lidiar y tratar con lo mismo; el sentirse traicionado o engañado; constantes fracasos en la vida.

La mayoría de las personas que han endurecido sus corazones no se dan cuenta o no lo admiten.

Por eso tenemos que identificar si nuestro corazón está endurecido.

Las personas con corazón un endurecido:

Se aíslan de las personas o se le dificulta confiar en ellas.
No escuchan consejos.
Se les dificulta amar o mostrar afecto.
Se les dificulta alegrarse por las victorias de los demás.

Pero lo peor de un corazón endurecido como ya lo hemos mencionado está en Hebreos 12: 15

¨… Tengan cuidado de que no brote ninguna raíz venenosa de amargura, la cual los trastorne a ustedes y envenene a muchos.¨

Cuando tenemos un corazón dañado; dañamos a otros, cuando tenemos un corazón contaminado; contaminaremos a otros, cuando tenemos un corazón herido; heriremos a otros, por eso es necesario escudriñar nuestros corazones porque si no permitimos que Dios sane y restaure nuestro corazón limitaremos lo que Dios quiere producir en nuestras vidas.

Debemos entender que no necesitamos estar sufriendo, ni amargados, ni en contienda para tener un corazón endurecido; así como los fariseos, podemos cantar, servir, predicar, enseñar y aun así vivir con un corazón endurecido; porque cuando tenemos un corazón endurecido aprendemos a sobrevivir, aprendemos a hacer lo que tenemos que hacer, aprendemos a aparentar.

Como Sanar el Corazón

Pero: ¿Cómo sanamos nuestros corazones? En Marcos 7: 24 – 30 vemos un evento que cuando lo analizamos nos puede ayudar para entender lo que se requiere para sanar nuestros corazones.

En esta historia vemos una madre que tenía una hija con una condición que estaba fuera de su control y nos dice la Biblia que Jesús entró en una casa y no quería que nadie supiera que Él estaba en esa casa; pero no pudo esconderse, porque había una mujer que tenía una hija con un espíritu maligno y lo fue a buscar.

Cuando miramos la escena, nos dicen los v. 25 – 26:

̈ Enseguida una mujer que había oído de él se acercó y cayó a sus pies. Su hijita estaba poseída por un espíritu maligno y ella le suplicó que expulsara al demonio de su hija¨.

¿Se imagina lo que se siente al ver que tu hija está poseída por un espíritu maligno? Esto no es el tener una hija rebelde o desobediente, esto es el tener una hija que está fuera de su razonamiento, fuera de su control, esto muestra la imposibilidad de una madre de poder hacer algo por su hija.

Como Sanar un Corazón Endurecido?

Anhelar la sanidad de nuestro corazón desesperadamente.

Las personas que tienen un corazón endurecido no quieren vivir en esa condición, se les facilita hacerlo pero no quieren vivir en ella, nadie disfruta tener una raíz de amargura, nadie disfruta el sentir odio, rencor, desconfianza, limitación, pero la realidad es que podemos acostumbrarnos a vivir así.

Por eso es que debemos anhelar la sanidad de nuestros corazones desesperadamente.

Debemos anhelar un mejor futuro.

Cuando tenemos hijos, una de las cosas que como padres anhelamos es el ver que el destino y el futuro de nuestros hijos sea prometedor; pero para esta mujer era imposible el poder creer que esto podía pasar con su hija; básicamente esa mujer veía su futuro limitado por su condición.

Así mismo es el corazón endurecido, el corazón endurecido nos limita de ver que tenemos un futuro prometedor y lleno de bendición; por eso es que tenemos que atrevernos a creer que las heridas pasadas no son las que determinan nuestro futuro, sino que es Dios y su palabra las que la determinan

Clamemos a Jesús.

Cuando esta mujer se dio cuenta que no tenía una solución para su situación eso la llevó a buscar a Jesús; ella tomó una decisión radical y nos dice la Biblia que hizo lo mismo que vimos la semana pasada; ella:

Se acercó.
Se postró.
Le suplicó.

No olvidemos que el clamor revela que tenemos una necesidad profunda de Dios, que dependemos totalmente de Él, provoca que Dios hable sobre nuestras vidas; y provoca que Dios desate su Palabra sobre nuestras vidas. Cuando tenemos un corazón endurecido, no queremos venir a Dios, esto fue lo que Jesús dijo en Mateo 13: 15 que el corazón endurecido les limitaba de venir a Él, para que fueran sanados.

La persona que tiene un corazón endurecido no quiere vivir en esa condición, pero se le dificulta considerar que hay esperanza de sanidad, porque ya lleva tanto tiempo en esa condición que no puede concebir que hay otra manera de vivir.

Calla las voces, ignora todo lo demás y enfócate en Jesús.

Cuando la mujer vino a Jesús, en Mateo 15: 23 nos dice que:

¨…los discípulos le pidieron que la despidiera. Dijeron: Dile que se vaya. Nos está molestando con sus súplicas¨.

¿Usted se imagina esa escena: Esta mujer rogándole a Jesús que liberara a su hijita; mientras por otro lado las personas a su alrededor, mandándola a callar y diciéndole que se vaya? Así es el corazón endurecido; por un lado puedes estar buscando clamar a Dios, buscar a Dios, alabar a Dios y por otro lado, el corazón endurecido te grita que te cayes, que no tiene sentido pedir clamar, que Dios no está interesado en ti.

El corazón endurecido siempre querrá recordarte lo que te hicieron, como te lastimaron, cómo te dañaron, el corazón endurecido viene a interrumpir tu alabanza, tu clamor, tu devoción, tu convicción.

Pero es ahí que tenemos que hacer como esta mujer, que ella ignoró todo lo que los discípulos decían, ignoró el rechazo de ellos y simplemente se enfocó en Jesús, y se mantuvo buscándolo.

Persistir en Busca de la Sanidad.

Cuando Jesús le contesta a esta madre; dice: Marcos 7: 27 que Jesús le dijo:

¨Primero debo alimentar a los hijos, a mi propia familia los judíos. No está bien tomar la comida de los hijos y arrojársela a los perros¨.

A los gentiles se les llamaba perros, porque no guardaban la tradición y se comían los animales que se consideraban inmundos. Pero lo que Jesús estaba mostrándole con esto era que tan lejos ella se encontraba y Jesús quería revelarle que aunque ella estuviera muy lejos, su amor está muy cerca.

A pesar de la resistencia inicial de Jesús, esta mujer no se rindió, sino que ella persistió y continuó ; esto es lo que tenemos que hacer para sanar nuestros corazones, tenemos que hacer como hizo esta mujer; persistir, porque cuando Jesús le dijo que lo que le dijo, ella contestó en el v. 28:

¨Es verdad, Señor, pero hasta a los perros que están debajo de la mesa se les permite comer las sobras del plato de los hijos¨

En otras palabras la mujer le dijo: SI, yo se que estoy lejos, pero si queda algo; yo se que no me puedo sentar a la mesa, pero si queda algo, yo se que no lo merezco, pero si queda algo. En otras palabras: Yo no me voy a mover hasta que hagas algo por mi.

Es muy complicado para una persona con el corazón endurecido entender que el amor de Dios está muy cerca, le es muy difícil creer que Dios tiene un propósito mayor para su vida, le es muy difícil creer que todo obra para el bien de los que aman a Dios, el dolor les hace pensar que el endurecer los corazones es la solución para que no les duela mas.

Por eso es que la alabanza, la adoración, la oración, la Palabra, la devoción y el servicio a Dios, nos ayudan a persistir, nos ayudan a no rendirnos, nos ayudan a continuar, nos ayudan a que cuando veamos que el cielo se ha cerrado creamos que se abre a nuestro favor, que cuando sintamos que nuestra esperanza se ha limitado ahora creamos en fe.

CONCLUSION

Nos dice 1 Samuel 16: 7 que Dios le dice a Samuel:

¨No juzgues por su apariencia o por su estatura, porque yo lo he rechazado. El Señor no ve las cosas de la manera que tu las ves. La gente juzga por las apariencias, pero el Señor mira el corazón¨.

El que el Señor mire el corazón significa:

que Dios examina e inspecciona nuestros corazones, y conoce lo que nos ha dañado, herido, lastimado y que Él tiene todo lo que necesitamos para sanarlo, transformarlo y restaurarlo.

Cuando hemos sido lastimados, heridos, traicionados, engañados, criticados, lo que sucede es que todo eso nos vende una mentira, esa mentira penetra nuestras mentes, comienza una operación en ella que eventualmente termina llegando a nuestros corazones y una vez que acampa en nuestros corazones, los endurece y eso ahora provoca que nuestros oídos se cierren para no escuchar la verdad de Dios y nuestros ojos no vean lo que Dios está haciendo y nos apartamos entonces de Dios, se apaga nuestra esperanza, se extingue nuestra fe y no podemos ser sanados por Dios.

Pero cuando persistimos en orar, en alabar, en adorar, en glorificar a Dios, lo que sucede es que comienza un proceso en el cual todo esto permite que se le informe a tu mente que la verdad de Dios es mayor que la mentira del dolor; comienza una lucha en la mente entre la mentira que nos vende el dolor y la verdad del amor de Dios; y cuando persistimos eventualmente por medio de la alabanza, la oración, la palabra, ahora la mente le informa al corazón que a pesar de todo lo que le ha sufrido, Dios sigue en control, que a pesar de todas las traiciones que has atravesado, Dios sigue siendo fiel; que a pesar de todo el rechazo que has experimentado Dios sigue manifestando su amor y eso sana, restaura y fortalece nuestros corazones y no hay un corazón más fuerte que aquel que ha sido renovado por Dios.

Dios quiere renovar tu corazón, Dios quiere restaurar tu corazón, Dios quiere darte un nuevo corazón, pero para que ese proceso tenga efecto en tu vida, tienes que entregarle a Él tu corazón herido, dañado, endurecido y dejar que Él te de su corazón sanado, restaurado y transformado.

¿No te gustaría tener un nuevo corazón ?

En este momento, toma un tiempo para rendir tu corazón en alabanza y adoración. El diablo quiere hacernos pensar que Dios te ha dejado, que Dios te ha desechado, que Dios te ha abandonado, pero tu sabes y sientes en este momento que dentro de tu corazón algo se está despertando, cada latido de tu corazón te está informando que Dios no ha terminado la obra, que Dios aún está operando, que Dios te está sanando, que si aun estas con vida es porque nada de lo que te han hecho te ha podido derrumbar porque el amor de Dios en tu corazón es más fuerte que cualquier maldad que ha venido a dañarlo.

PALABRAS FINALES

Hay muchas personas que están viviendo en la condición en la que están porque alguien lastimó, hirió, dañó, afectó o maltrató su corazón y por esa razón es que no podemos parar de hablarle de Cristo a uno más, tenemos que alcanzar a uno mas, bendecir a uno mas, edificar a uno más, discipular a uno más, hasta que todos declaren que:

Jesús 7

Asunto Del Corazón