Sin Sentido 4

¿Que Sentido Tienen Las Pruebas?

By Richard Martinez, Pastor Principal, September 26, 2021

INTRODUCCION

Hemos estado hablando de que las pruebas que atravesamos vienen acompañadas de un propósito mayor de parte de Dios.

Las pruebas llegan a nuestras vidas para formar algo mayor en nosotros, para darnos una nueva revelación, para formar nuestro carácter, para ponernos en una relación correcta con Dios; lo que significa que cada una de estas cosas funcionan para nuestro propio beneficio.

MENSAJE

Beneficios De Las Pruebas

Quiero hablar de los beneficios de las pruebas, pero para que lo que hable hoy haga sentido, debemos preguntarnos lo siguiente: Lo que cada uno está atravesando,

¿es una consecuencia por las malas acciones o decisiones que van en contra de la voluntad de Dios?.

Si la respuesta es No o No creo; entonces podemos seguir a los demás. Si la respuesta es Sí o posiblemente,

entonces tenemos que arrepentirnos y tomar la decisión de cambiar y luego es que todo esto se aplica.

Cuando estamos atravesando un proceso doloroso o de sufrimiento, lo mejor que podemos hacer en el proceso es analizar: no el porqué lo estamos atravesando sino; qué puede formar en nuestra vida, qué podemos hacer mientras esperamos que Dios nos saque de esa situación; para que el resultado no sea un alivio temporal sino que sea una formación de carácter para el resto de nuestra vida.

El dolor que usted y yo podemos estar atravesando hoy en día no será el único que atravesaremos en la vida y mientras más rápido aprendamos estos conceptos, estaremos mejor preparados para no permitir que el sufrimiento saque la peor parte de nosotros.

Miremos algunos beneficios del sufrimiento y las pruebas.

1. Las Pruebas Nos Llevan A Un Mayor Nivel De Fe.

La semana pasada mencionamos el proceso de Job y vimos que él era un hombre que amaba a Dios; por ejemplo: nos dice el JOB 1.5 que Job tenía una relación excelente con Dios; en el v. 8 Dios se expresa de Job de manera excelente, El dijo que Job era un siervo, el mejor hombre en toda la tierra, un hombre intachable, de absoluta integridad, con temor de Dios y apartado del mal.

Esto debe llevarnos a pensar que si Dios se expresó así de Job, significa entonces que no tendría sentido que alguien como Job no tendria porque pasar por ningún proceso doloroso, ningún tipo de sufrimiento o prueba; pero como todos sabemos, no fue así, Job perdió a sus hijos, su estabilidad y su salud.

Job tuvo que pasar por un sufrimiento profundo; pero ese proceso lo llevó a un mayor nivel de fe, de entrega y confianza en Dios, al punto que en medio de su sufrimiento, él expresaba que todos lo habían abandonado, que sus amigos se olvidaron de él, que le daba asco a su esposa y que su familia lo rechazaba.

En medio de todo este proceso en

Job 19. 24 - 27 él declaró: Oh, que mis palabras fueran grabadas; oh, que quedaran escritas en un monumento, 24 talladas con cincel de hierro y rellenas de plomo, y labradas en la roca para siempre. 25 Pero en cuanto a mí, sé que mi Redentor vive, y un día por fin estará sobre la tierra. 26 Y después que mi cuerpo se haya descompuesto, ¡todavía en mi cuerpo veré a Dios! 27 Yo mismo lo veré; así es, lo veré con mis propios ojos.

Job encontró fuerzas donde nos las tenía, porque el sufrimiento tiene la habilidad de provocar lo mejor de Dios en nosotros. Por eso es que cuando estamos sufriendo y dependemos de Dios podemos tener la habilidad de declarar en fe como lo hizo él y declarar que veremos lo mejor de Dios. El apóstol Pedro nos enseñó que hay una relación entre la prueba y la fe, que la prueba es necesaria para probarnos a nosotros mismos cómo está nuestra fe.

1 Pedro 1: 6 - 7 dice Así que alégrese de verdad les espera una alegría inmensa Aunque tienen que soportar muchas pruebas por un tiempo breve estas pruebas demostrarán que su fe es auténtica está siendo probada de la misma manera que el fuego prueba y purifica el oro. Aunque la fe de ustedes es mucho más preciosa que el mismo oro Entonces su fe al permanecer firme en tantas pruebas les traerá mucha alabanza Gloria honra en el día que Jesucristo sea revelado a todo el mundo.

2. Las Pruebas Nos Impulsan A depender De Dios.

Una de las escrituras que más me ha ayudado es 2 Corintios 1, cuando el apóstol Pablo habla de las situaciones difíciles y complicadas que ellos atravesaron en Asia. Porque el dice en

2 Corintios 1: 8 en adelante en Asia fueron oprimidos y agobiados más allá de la capacidad que tenían para aguantar y hasta pensaron que iban a morir.

Lo interesante de esta escritura es cómo expresa que eso también tenía un propósito de parte de Dios, porque Dios los llevó a que dejaran de confiar en ellos mismos y les enseñó a poner su confianza en Él, los

  1. 9 - 10 dicen: De hecho, esperábamos morir; pero, como resultado, dejamos de confiar en nosotros mismos y aprendimos a confiar solo en Dios, quien resucita a los muertos. 10 Efectivamente él nos rescató del peligro mortal y volverá a hacerlo de nuevo. Hemos depositado nuestra confianza en Dios, y él seguirá rescatándonos.

Si hay algo que hacen las pruebas en nuestra vida es que nos ayudan a dejar de depender en nosotros mismos, y nos lleva a depender y confiar completamente en Dios.

El mejor estilo de vida que cualquiera de nosotros podemos tener es uno de total dependencia y confianza en Dios, especialmente cuando sabemos que el sufrimiento y las pruebas son inevitables.

Las pruebas tienen esta única característica que nos recuerda que somos incapaces de valernos por nosotros mismos, que si estamos de pie es por su gracia, es por su misericordia, es por su amor, es por su favor, las pruebas nos recuerdan que si estamos con vida es gracias a Él, que todo lo que tenemos es por El, que lo que logremos es porque Él lo ha permitido. Las pruebas nos llevan a volver a una relación correcta con Dios, nos ayudan a entender que sin Él estamos perdidos.

¿Por qué usted cree que cuando las personas atraviesan un momento doloroso, lo primero que hacen es invocar a Dios? Porque todo ser humano en su ser, sabe que depende de Dios y que es él único que nos puede rescatar. Por eso es que las pruebas nos recuerdan que necesitamos a Dios, que tenemos que volver a Dios, que dependemos de Dios.

3. Las Pruebas Nos Llevan A Enfocarnos En Dios.

En 2 Crónicas 20 cuando Josafat se vio enfrentando al ejército que venía en su contra, la Biblia nos dice que estaba lleno de miedo y en vez de buscar cómo huir, como luchar o cómo hacer una tregua; más bien lo que él hizo fue que se enfocó en Dios y dependió de Dios por medio de la oración.

2 Crónicas 20: 3 nos enseña que lo que Josafat hizo fue postrarse delante del Señor y llamó al pueblo a orar y ayunar, y ¿Porqué ayunar para que todo el enfoque del pueblo y de él fuera en Dios? porque no había nada que ni él, ni el pueblo pudieran hacer para salir de la situación en la que se encontraban.

Inclusive cuando ellos estuvieron en ayuno y oración, Dios les dijo en los v. 15 - 17 que no tuvieran miedo, que no se desalentaran, porque la batalla no era de ellos, sino que la batalla era de Dios, que se quedaran quietos y vieran la victoria que Dios les daría; por esa razón es que ellos pudieron entonar cantos de alabanza en medio de la batalla y Dios les dio la victoria.

Mientras más rápido entendamos que por más que tratemos, por más que nos esforcemos, que gritemos, que nos revelemos, que reneguemos, que luchemos, nada de esto acelerará ni aliviará el dolor en nuestras vidas; entonces más rápido nos enfocaremos en Dios para encontrar la paz que necesitamos en esos momentos.

Solo enfocándonos en Dios es que encontraremos la paz en medio de las pruebas, es por eso que me gusta tanto la alabanza y la adoración, porque me ayudan a dejar de enfocarme en aquello en lo cual no tengo una solución y a enfocarme solo en Él. Por eso es que el apóstol Pablo nos dice en

Filipenses 4: 6 ̈No se preocupen por nada en cambio oren por todo. Dígale a Dios lo que necesitan y denle gracias por todo lo que él ha hecho; así experimentarán la paz de Dios que supera todo lo que podemos entender la paz de Dios cuidará su corazón y su mente mientras vivan en Cristo Jesús. ̈

4. Las Pruebas Nos Llevan A Prestar Atención En La Palabra De Dios.

Por lo general se nos puede hacer muy fácil desenfocarnos del llamado de Dios, de los estatutos de Dios, de las instrucciones de Dios, de lo que Dios espera de nosotros; pero en ocasiones Dios permitirá que las pruebas lleguen a nuestra vida para re enfocarnos en su propósito divino.

Mateo 7: 24 - 27 nos enseña la diferencia entre la persona que vive en obediencia a la Palabra y la que la ignora; nos enseña que ambos atravesarán los mismos conflictos, las mismas pruebas; por ejemplo: a ambas casas les llegó la lluvia, les llegó la inundación, les llegó los vientos; pero una fue destruida en el proceso y la otra permaneció firme.

La diferencia estuvo en que una edificó haciendo su fundamento de vida y decisiones en la Palabra de Dios,

mientras el otro construyó su casa basado en su propio criterio. Las pruebas les llegó a las dos casas, a las dos familias, pero el resultado fue muy diferente, así mismo es con nosotros; cuando nuestra vida está dirigida por la Palabra, fundamentada en la Palabra, donde obedecemos la Palabra, no hay tormenta que nos destruya, pero cuando no lo está, la prueba nos lleva a la devastación.

Por eso vemos que el salmista dice en el

Salmo 119: 67: ¨Yo solía desviarme hasta que me disciplinaste pero ahora sigo de cerca tu palabra

En otras palabras está diciendo: yo vivía sin dirección ni disciplina, pero he aprendido a seguir y estar cerca de tu palabra porque me disciplinaste y me he dado cuenta

  1. 69 que tú eres bueno y haces únicamente el bien, por eso enséñame tus decretos.

Luego en los

  1. 71 - 72 dice: “El sufrimiento me hizo bien porque me enseñó a prestar atención a tus decretos tus enseñanzas son más valiosas para mí que millones en oro y plata. ̈

La palabra de Dios es valiosísima en nuestras vidas, es impresionante en nuestras vidas y nos ayuda a encontrar y conocer la dirección de Dios, nos ayuda a enfocarnos en Dios y a darnos cuenta de si nos hemos desviado.

CONCLUSION

5. Las Pruebas Producen En Nosotros Una Gloria Eterna.

Observemos lo que dijo el apóstol Pablo

2 Corintios 4: 16 - 18 él dijo: Es por esto que nunca nos damos por vencidos. Aunque nuestro cuerpo está muriendo, nuestro espíritu va renovándose cada día. Pues nuestras dificultades actuales son pequeñas y no durarán mucho tiempo sin embargo nos producen una gloria que durará para siempre y que es de mucho más peso que las dificultades. Así que no miramos las dificultades que ahora vemos, en cambio fijamos nuestra vista en cosas que no pueden verse pues las cosas que ahora podemos ver pronto se habrán ido o pero las cosas que no podemos ver permanecerán para siempre.

En otras palabras el Apóstol estaba diciendo que la razón por la que no se daban por vencidos en medio del dolor que estaban atravesando era porque sabían que produciría un resultado mayor, un resultado eterno, un resultado tan inexplicable que si Dios nos lo explicara no lo entenderíamos, pero que definitivamente es mayor que lo que podemos imaginar.

Una vez escuché la historia de un misionero que se fue con su familia a una tribu de África, luego de ellos vender todo e irse a evangelizar esa tribu, la tribu no los recibió y tuvieron que vivir en las afueras de la aldea donde en las tardes siempre llegaba un niño a visitarlos; pero el niño no los entendía. Un tiempo después la esposa de este hombre murió y él cayó en tal amargura que terminó alcohólico, dejó a su hija a cargo de otros misioneros y se apartó de Dios. Esta niña años más tardes se casó con un misionero. Un día mientras ella estaba en una iglesia en Inglaterra escuchó a un hombre africano predicando y cuando se conocieron y hablaron, resulta que el hombre que estaba predicando era aquel niño que los visitaba.

Aquel niño ahora era un Pastor que había comenzado cientos de Iglesias y algunos institutos bíblicos. El hombre le comentó que aunque él no los había podido entender, el amor que había recibido de la madre de la muchacha había sido tan significativo que por esa razón él le abrió su vida a Cristo años más tarde y hoy se había convertido en un gran predicador. Cuando años después ella se encontró con su padre, él aún estaba amargado y la amargura no le permitió ver que lo que Dios había hecho era mayor que el sufrimiento que había atravesado.

Me pregunto a cuántos de nosotros nos sucede lo mismo, que en medio de las pruebas, el dolor no nos permite apreciar que Dios está buscando hacer algo nuevo y que en el proceso es necesario quebrantarnos para llenarnos de lo mejor de Él, para darnos lo mejor de Él, para manifestarnos lo mejor de Él, para depositar su vino nuevo en nosotros.

La Biblia nos enseña que el vino nuevo solo se puede echar en odres nuevos. Lo que significa que lo nuevo de Dios, lo mejor de Dios, tiene que ser depositado en mentes y corazones nuevos. Pero en una ocasión escuché que para que el vino nuevo se deposite en un odre viejo, el odre viejo se tiene que golpear, echar en aceite, apretar y luego volver a golpear hasta que se quebranta y ahora está listo para recibir el vino nuevo.

Así son las pruebas en nuestras vidas, nos quebrantan, nos aplastan, nos duele, pero nos preparan para recibir lo mejor de Dios en nuestras vidas.

Es posible que Dios lo haya tenido que quebrantar, lo haya tenido que procesar, le haya permitido pasar por pruebas difíciles; pero así como Dios tenía un plan mayor para todos los ejemplos que vimos, así mismo su plan sobre su vida es mayor que lo que puede imaginar. Eso que Dios le permite pasar es para que experimente lo mejor de Dios en su vida, para que experimente a CRISTO.

Cuando estemos sufriendo no dejemos que las pruebas nos amarguen, que nos lleven a dejar de servirle a Dios, que nos limiten de adorarlo; no permitamos que nos amarguen, sino que en las pruebas gritemos con todas nuestras fuerzas que aunque nos duela, la verdad es que:

NO HAY NADA MEJOR QUE SER CRISTIANO