INTRODUCCION

La semana pasada se habló de la vida de Job, de cómo vivió, lo que atravesó y su desenlace. Pudimos ver como Dios se expresa de Job.

Job 1: 8: “Entonces el Señor preguntó a Satanás: ¿Te has fijado en mi siervo Job? Es el mejor hombre en toda la tierra; es un hombre intachable y de absoluta integridad. Tiene temor de Dios y se mantiene apartado del mal.”

Pudimos ver como Satanás le contestó a Dios en los

5. 9 - 11: v. 9 - 11: “Satanás le respondió al Señor: —Sí, pero Job tiene una buena razón para temer a Dios: 10 siempre has puesto un muro de protección alrededor de él, de su casa y de sus propiedades. Has hecho prosperar todo lo que haces. ¡Mira lo rico que es! 11 Así que extiende tu mano y quítale todo lo que tiene, ¡ten por seguro que te maldecirá en tu propia cara!.”

Como queriendo probarle a Dios que la razón de la integridad y el amor de este hombre llamado Job se debía a que Dios lo había colmado de bendiciones, pero que si se las quitaba, Dios podría tener por seguro que Job llegaría a maldecirlo en su propia cara.

Yo no sé si alguien nota lo interesante del argumento; porque siendo muy sarcástico en mi comentario: Yo no creo que haya la posibilidad de que alguien llegue a amar a Dios, adorar a Dios, servir a Dios, diezmar a Dios y buscar a Dios, cuando todo va muy bien, pero cuando las cosas le van mal, olvidarse de Él. No creo que eso sea posible.

Luego de ese intercambio entre Dios y Satanás, Dios le dice a Satanás en el

5. 12: “Muy bien, puedes probarlo. Haz lo que quieras con todo lo que posee, pero no le hagas ningún daño físico”

Primero le robaron todos los bueyes y los burros, y mataron a todos los trabajadores; y le traen la noticia a Job; cuando terminan de darle esa noticia, le llega otra noticia: cayó fuego del cielo y el fuego mató a todas sus ovejas y a los pastores; terminando esa noticia, le llega otra: le robaron todos sus camellos y terminando esa aún llega otra: todos sus hijos murieron en lo que aparentaba ser un tornado.

MENSAJE

Dolor En La Celebración

Nadie sabe por qué Dios le dio permiso a Satanás, para probar a Job; en ocasiones yo mismo me he cuestionado esto.

¿Pero habrá sido porque Dios sabía lo que había invertido en Job y como lo había equipado? ¿Posiblemente porque Dios es Alpha y Omega?

Pero la realidad es que a mí personalmente me da paz saber que lo que le sucedió a Job no fue algo que al enemigo se le ocurrió y lo hizo, aunque me pone nervioso el saber que Dios le dio permiso; a la vez me da paz saber que para el enemigo no puede hacer nada si Dios no lo autoriza. Así es la soberanía de Dios.

Pero esta no es la única vez en la Biblia que vemos a Dios probando el corazón del ser humano; Deuteronomio 8: 2 - 3 le dice al pueblo de Israel, como fue su idea y plan para pasarlos por el desierto:

“Recuerda cómo el Señor tu Dios te guió por el desierto durante cuarenta años, donde te humilló y te puso a prueba para revelar tu carácter y averiguar si en verdad obedecerías sus mandatos. 3 Sí, te humilló permitiendo que pasaras hambre y luego alimentándote con maná, un alimento que ni tú ni tus antepasados conocían hasta ese momento. Lo hizo para enseñarte que la gente no vive solo de pan, sino que vivimos de cada palabra que sale de la boca del Señor.”

Lo vemos en Isaías 53, donde se nos explica que todo el sufrimiento que Jesús atravesó era parte del gran plan de Dios. Podemos verlo en la vida de Jose como Dios permitió que Jose fuera vendido como esclavo, encarcelado, desechado para llevarlo a donde Él había determinado.

Por eso es que aunque sea difícil de absorber y entender el sufrimiento, aunque no nos guste y lo evitemos, aunque sea inevitable, los procesos de sufrimiento en nuestras vidas juegan un papel importante en nuestra formación. Porque aun el sufrimiento de Job tenía un propósito mayor que Job mismo no entendía.

Por difícil que suene, el sufrimiento de Job no fue infligido por el enemigo, con el sello de aprobación de Dios; o sea, permitido por Dios.

Lo que nos demuestra que hay algo poderoso que sucede en nuestras vidas que viene como resultado del sufrimiento; por ejemplo, en varias ocasiones, los momentos de sufrimiento de Pablo sirvieron para que creciera en su relación con Dios; cuando expresó el aguijón en su carne, conoció un mayor nivel de la gracia de Dios; cuando estuvo a punto de perder la vida en Asia, aprendió a depender de Dios y no de sus fuerzas y así sucesivamente. Si creemos en el amor de Dios y sabemos cuánto Dios nos ama, podremos creer que jamás nos permitiría sufrir si no hubiese un propósito mayor en el proceso.

Batalla De La Fe En El Sufrimiento

El enemigo buscó afectar a Job en las 3 áreas más vulnerables del ser humano:

1. La estabilidad.
2. La familia.
3. La salud.

Estas áreas son las mismas áreas o razones por las que muchas personas llegan a dudar del amor de Dios.

• ¿Cómo reaccionamos cuando se ve afectada una de esas áreas en nuestras vidas?
• ¿Cuándo la estabilidad económica se ve afectada?
• ¿Cómo reacciona usted?
• ¿Sigue con la misma fidelidad a Dios?
• ¿Cuándo se ve afectado el matrimonio y están pasando por un proceso de contiendas?
• ¿Cuándo los hijos comienzan a dar dolores de cabeza.¿Continúa adorando a Dios en esos momentos? O cuando se afecta la salud.
• ¿Mantiene su fe en ese momento?

Job soportó la prueba, aun cuando escuchó el insulto de la única persona en el mundo con la que podía contar en

Job 2: 8 - 9 nos dice: “Job, sentado entre cenizas, se rascaba con un trozo de teja. 9 Su esposa le dijo: «¿Todavía intentas conservar tu integridad? Maldice a Dios y muérete”

En el proceso nos dice el

5. 10: “Sin embargo, Job contestó: «Hablas como una mujer necia. ¿Aceptaremos solo las cosas buenas que vienen de la mano de Dios y nunca lo malo?». A pesar de todo, Job no dijo nada incorrecto.”

La Biblia dice que Job no dijo nada incorrecto, pero no dice que no pensó nada incorrecto; porque Job estaba batallando con su fe, tenía una batalla en la mente, sus pensamientos lo estaban atormentando y lo vemos porque un día le dijo a su esposa “Hablas como una mujer necia.

¿Aceptaremos solo las cosas buenas que vienen de la mano de Dios y nunca lo malo?». Pero más adelante en Job 3 se desahoga con tal dolor que comienza diciendo en

5. 1 - 3: Por fin habló Job y maldijo el día de su nacimiento. 2 Dijo: 3 Que sea borrado el día en que nací, y la noche en que fui concebido.

En los

5. 10 - 11: “Maldigo ese día por no haber cerrado el vientre de mi madre, por haberme dejado nacer para presenciar toda esta desgracia. ¿Por qué no nací muerto? ¿Por qué no morí al salir del vientre?”

En el

5. 23: ¿Por qué dar vida a los que no tienen futuro, a quienes Dios ha rodeado de dificultades?

En los

5. 25 - 26: “Lo que yo siempre había temido me ocurrió; se hizo realidad lo que me horrorizaba. 26 No tengo paz ni tranquilidad; no tengo descanso; solo me vienen dificultades”

Pero es importante mencionar que es normal luchar con nuestra fe en medio del sufrimiento, inclusive al parecer es una reacción normal a los procesos dolorosos que nos llegan en la vida. Porque fe, no es pretender que no nos duele lo que estamos atravesando; ni tampoco es que no llegue la duda en medio del dolor, sino que la fe es el continuar creyendo a pesar del dolor, es creer a pesar de la duda, es forzarnos a nosotros mismos a confiar en Dios cuando todo habla en nuestra contra; eso es fe, es mantener la certeza de lo que esperamos y tener la convicción de lo que aún no podemos ver, es continuar creyendo que Dios tiene la última palabra y Él está a mi favor.

Si hay algo que he podido aprender en mis procesos de sufrimiento, es que los procesos dolorosos son excelentes para probarnos a nosotros mismos: si las circunstancias van a cambiar las convicciones que tengo de Dios, o si mis convicciones de Dios van a sostenerme en medio de las circunstancias. Lo que yo he podido aprender es que cuando continuamos creyendo en medio de nuestros procesos de sufrimiento nos damos cuenta de que Dios es más grande que lo que estamos atravesando y que sus misericordias son nuevas cada mañana.

Esa es la verdadera batalla de la fe, cuando comenzamos en ese tira y jala en medio del dolor, donde me acuesto llorando, y por la mañana me levanto con nuevas fuerzas; y de repente me llega otra noticia que me devasta, pero luego y luego encuentro fuerzas para alabarlo y de repente sucede algo que me decepciona y vuelvo de nuevo a llenarme de confusión y de repente comienzo a orar y me siento fortalecido y lleno de esperanza. Esa es la verdadera batalla de la fe, donde tenemos que insistir en creer, en que nuestras convicciones hablen más fuerte que nuestros temores y situaciones.

CONCLUSION

Adoración En El Sufrimiento

Pero la pregunta que todos debemos hacernos es:

¿Cómo pudo Job soportar tanto?

Y para esto tenemos que volver a

Job 1: 20 - 22 que dice: “Job se levantó y rasgó su vestido en señal de dolor; después se rasuró la cabeza y se postró en el suelo para adorar 21 y dijo: «Desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo estaré cuando me vaya. El Señor me dio lo que tenía, y el Señor me lo ha quitado. ¡Alabado sea el nombre del Señor!». 22 A pesar de todo, Job no pecó porque no culpó a Dios.”

Aquí podemos ver que la primera reacción de Job, fue el dolor, pero inmediatamente que Job manifestó su dolor, nos dice que hizo lo que todos debemos inmediatamente hacer; Job se postró en el suelo a adorar.

Algunos se preguntarán. ¿Que tiene que ver la adoración con el sufrimiento? Muchas personas no entienden el poder de la adoración en el sufrimiento porque lo ven como un momento cargado de sentimentalismo en el cual le cantamos a Dios. Y si hay algo que yo he aprendido es que no podemos combatir sufrimientos con sentimientos.

Si el sufrimiento comenzamos a combatirlo con alegría, pareceremos falsos o locos, el sufrimiento no se combate con sentimiento, pero si con adoración. La adoración es cuando sometemos toda nuestra naturaleza, pensamientos y sentimientos a Dios. Es cuando nos forzamos a reconocer quien es Dios, su santidad, su poder, su soberanía, y eso nos mueve a un temor reverente, y ese temor reverente es lo que motiva a nuestra alma, nuestra mente, nuestro espíritu y todo nuestro ser a reconocer a Dios por encima de cualquier cosa.

Adoración no es saber la letra de una canción, adoración es cuando la letra de la canción que honra a Dios cobran vida en mi mente, mis pensamientos, mi espíritu y todo mi ser y reconozco que Dios es más grande que lo que estoy atravesando. La adoración me lleva a un temor reverente que no me permite renegar, maldecir, o culpar a Dios, sino expresar mi dolor y mi amor.

Inmediatamente, que Job comenzó su sufrimiento; adoró a Dios, y fue adorando que recibió una revelación de parte de Dios, que lo llevó a declarar: “Desnudo, salí del vientre de mi madre, y desnudo estaré cuando me vaya. El Señor me dio lo que tenía, y el Señor me lo ha quitado. ¡Alabado sea el nombre del Señor!”¿Qué le habrá revelado Dios mientras estaba postrado en adoración, buscando el consuelo de Dios que ahora declara unas palabras tan poderosas como esas?

En el Salmo 13 el Salmista nos ilustra un evento similar al que acabamos de describir. Nos dice que el Salmista dice: “Oh Señor, ¿hasta cuándo te olvidarás de mí? ¿Será para siempre? ¿Hasta cuándo mirarás hacia otro lado? 2 ¿Hasta cuándo tendré que luchar con angustia en mi alma, con tristeza en mi corazón día tras día? ¿Hasta cuándo mi enemigo seguirá dominándome? 3 Vuélvete hacia mí y contéstame, ¡oh Señor, mi Dios! Devuélvele el brillo a mis ojos, o moriré. 4 No permitas que mis enemigos se regodeen diciendo: «¡Lo hemos derrotado!». No dejes que se regodeen en mi caída. 5 Pero yo confío en tu amor inagotable; me alegraré porque me has rescatado. 6 Cantaré al Señor, porque él es bueno conmigo.”

Cuando en medio del dolor escogemos adorar a Dios, porque necesitamos su consuelo; en el proceso nos daremos cuenta cuan grande es Él, cuanto amor tiene para con nosotros nuestro y ahí en su presencia, es que podremos recibir las mayores palabras de consuelo y las mayores experiencias del amor de Dios para nuestras vidas.

Si estás pasando por un proceso doloroso, o si alguna vez has pasado por un proceso doloroso del cual ya te resignaste, pero no has sanado; toma este tiempo para derramar tu corazón delante de Dios, para buscar el consuelo de Dios, no lo ignores; solo el consuelo de Dios es lo que nos da sanidad.

Hay muchas personas que no han podido tener una relación genuina con Dios, su relación con Dios es distante por un proceso de dolor y sufrimiento que han atravesado en la vida, que no se explican, el porqué tuvieron que pasar, lo que tuvieron que pasar y no encuentran consuelo; hay otros que el enemigo los ha mantenido lo más lejos posible de Dios, y no han podido encontrar paz para sus almas y corazones, pero este día puede ser el día en que encuentres consuelo y paz para tu alma entregando tu vida a Cristo Jesús, la vida en Cristo no es una libre de problemas, ni sufrimientos, pero es una en la que encontramos consuelo y paz en medio de los problemas y sufrimientos.

Job era una persona que constantemente buscaba a Dios y amaba a Dios y por eso es que cuando atraviesa este proceso devastador, él hizo lo que sabía hacer y es por eso que no debemos esperar a atravesar un momento doloroso para buscar a Dios y tener una mayor intimidad con Él, porque cuando nos mantenemos en estrecha relación con Dios, aun en medio del sufrimiento, podremos declarar que:

NO HAY NADA MEJOR QUE SER CRISTIANO