INTRODUCCION

La semana pasada Pastor nos compartió sobre el evento que resaltó el corazón inquebrantable de los tres jóvenes hebreos, que fueron echados al horno de fuego, por no arrodillarse delante de la estatua del rey Nabucodonosor.

Cualquiera de nosotros quedaría extasiado al presenciar algo así, cuanto más el rey que fue quien dio la orden para echarlos dentro del horno y luego ver un resultado muy diferente al que él esperaba, y no solo diferente, sino extraordinario, sobrenatural y con tanto poder. Era innegable la presencia del poder que Dios desplegó en este gran milagro.

Partiendo de ahí, quisiera preguntar, cuántos de nosotros hemos sido testigos de eventos o milagros en los cuales decimos algo como; nadie más que Dios en su gran poder lo pudo haber hecho, es decir, es tan grandiosamente impresionante que tiene el sello de Dios.

MENSAJE

Daniel 4: 1-3 nos dice: “El rey Nabucodonosor envió el siguiente mensaje a la gente de todas las razas, naciones y lenguas del mundo: «¡Paz y prosperidad a todos! 2 »Quiero que todos conozcan las señales milagrosas y las maravillas que el Dios Altísimo ha realizado en mi favor. 3 ¡Cuán grandiosas son sus señales y cuán poderosas sus maravillas! Su reino durará para siempre, y su dominio por todas las generaciones. 4 Yo, Nabucodonosor, vivía en mi palacio con comodidad y prosperidad”.

Nabucodonosor comienza alabando a Dios y hablando de las cosas que Dios había hecho a su favor y como todo esto lo había hecho sentir y disfrutar de comodidad y prosperidad.

Sin embargo, no era la primera vez que él se expresaba así de Dios, no era la primera vez que lo alababa de esta forma, porque no fue la primera vez que experimentó el poder de Dios.

La primera vez que alabo a Dios de esta forma en el capítulo

Daniel 2:47 dijo: «En verdad, tu Dios es el más grande de todos los dioses, es el Señor de los reyes, y es quien revela los misterios, porque tú pudiste revelar este secreto».

La segunda vez que viene y alaba a Dios es en el capítulo

Daniel 3:28-29, cuando dice: “Entonces Nabucodonosor dijo: «¡Alabado sea el Dios de Sadrac, Mesac y Abed-nego! Envió a su ángel para rescatar a sus siervos que confiaron en él. Desafiaron el mandato del rey y estuvieron dispuestos a morir en lugar de servir o rendir culto a otro dios que no fuera su propio Dios. 29 Por lo tanto, yo decreto: si alguien, cualquiera sea su raza, nación o lengua, habla en contra del Dios de Sadrac, Mesac y Abed-nego, será despedazado y su casa será reducida a un montón de escombros. ¡No hay otro dios que pueda rescatar de esta manera!».

Vemos a Nabucodonosor hablando de cada experiencia milagrosa y de cómo pudo presenciar, el poder de Dios y ser testigo. De la misma manera, a muchas personas Dios les da la oportunidad de experimentar su poder, por ejemplo: cuando atravesaste esa enfermedad terminal y llegaste a pensar, “de esta ya no salgo vivo”, pero Dios, desplegó su poder a tu favor y te sano, entonces dijiste gloria a Dios, o tenías tu matrimonio cargándolo en los brazos y fuiste a pedir consejo con la tía, la vecina chismosa, la comadre metiche y te dijeron vaya con mi tío el brujo que hace unos buenos amarres, para que te diera la pócima del amor eterno, y no funciono y luego fuiste a que te leyeran las cartas, que te leyeran el futuro, el horóscopo, el tarot y cada vez veías más pedazos que al inicio, hasta que al final alguien te invito a venir a la iglesia y tu matrimonio fue expuesto al despliegue del poder del amor, del abrazo de Dios, y tu matrimonio se restauro y quedaste tan maravillado que alabaste a Dios y le dijiste: Tú eres el Dios, nadie como tú.

También a muchos, Dios los sacó de las drogas, de apostar en juegos, del alcohol, del narcotráfico, de practicar hechicería, santería y vinieron a Dios, Él los perdonó, los levantó y alabaron por eso.

Pero, no es cierto que ese evento que debió ser el parte aguas de una relación con Dios, para muchos solo representó un evento maravilloso, no hicieron más después de eso, se quedaron solo como espectadores, no siguieron avanzando, solo se quedaron ahí. Muchos ven a Dios solo como salvador, le piden perdón y le dicen, yo quiero vivir contigo en el cielo, sé mi salvador, pero nunca lo dejamos que sea nuestro Señor, para que nos guíe, nos enseñe, nos dirija, solo queremos vivir en la bonanza de la comodidad y de la prosperidad, de la misma manera como lo hizo Nabucodonosor.

Advertencia De Dios

Los versos del 5 al 17, nos cuentan que Nabucodonosor tuvo otro sueño, esta vez fue diferente, el rey les contaría el sueño y ellos solo tenían que interpretarlo,

Daniel 4. 7 ”Cuando se presentaron los magos, los brujos, los astrólogos y los adivinos, les conté el sueño, pero no pudieron explicarme el significado. 8 Finalmente Daniel se presentó ante mí y le conté él sueño. (Daniel lleva el nombre de mi dios, Beltsasar. El espíritu de los dioses santos vive en él).

Pareciera que Nabucodonosor, por todo lo que ya había visto y experimentado de Dios, tendría su confianza en Él, pero no, seguía teniendo su grupo de magos y adivinos, es más, había puesto a Daniel al frente de todos ellos, pero no llamo a Daniel primero, por qué?, porque no confiaba de todo corazón en Dios, solo recurre a Dios después de haber usado sus propios recursos, pero seguía siendo idólatra, como lo vemos en los versículos

Daniel 47-8, “Cuando se presentaron los magos, los brujos, los astrólogos y los adivinos, les conté el sueño, pero no pudieron explicarme el significado. 8 Finalmente Daniel se presentó ante mí y le conté el sueño. (Daniel lleva el nombre de mi dios, Beltsasar. El espíritu de los dioses santos vive en él).

Pero antes de que juzguemos a Nabucodonosor, seamos honestos, nosotros mismos ya sabemos en quién podemos encontrar la respuesta de todo, sabemos a donde correr, porque ya vivimos una experiencia con Dios, sabemos muy bien lo que tenemos que hacer, pero, él solo vivir una experiencia con Dios no provoca un cambio en nuestro corazón, necesitamos ser intencional para conocer más a Dios y ver cómo puede actuar en mis finanzas, en mi carácter, en mi hombría, en la sabiduría que necesita una mujer.

Algo así le pasó a Nabucodonosor cuando leemos en los versos

Daniel 4. 19-26 “Al oír el relato, Daniel (también llamado Beltsasar) se quedó agobiado por un rato, atemorizado por el significado del sueño. Entonces el rey le dijo: “Beltsasar, no te alarmes por el sueño y lo que significa”.“Beltsasar respondió: “¡Mi señor, quisiera que los sucesos anticipados en este sueño ocurrieran a sus enemigos y no a usted! 20 El árbol que usted vio crecía alto y se hacía fuerte y se elevaba hacia los cielos para que todo el mundo lo viera. 21 Sus hojas eran verdes y nuevas, y tenía abundancia de fruta para que todos comieran. Los animales salvajes vivían bajo su sombra y las aves anidaban en sus ramas. 22 Ese árbol es usted, su majestad. Pues usted ha crecido y se ha hecho fuerte y poderoso; su esplendor llega hasta el cielo y su gobierno hasta los confines de la tierra. 23 »”Luego usted vio a un mensajero, un santo que descendía del cielo, y decía: ‘Talen el árbol y destrúyanlo, pero dejen en la tierra el tocón con las raíces, sujeto con una faja de hierro y bronce, y rodeado por la hierba tierna. Que lo moje el rocío del cielo. Que viva con los animales del campo durante siete períodos de tiempo’. 24 »”Esto es lo que significa el sueño, su majestad, y lo que el Altísimo ha declarado que le sucederá a mi señor, el rey. 25 Usted será expulsado de la sociedad humana y vivirá en el campo con los animales salvajes. Comerá pasto como el ganado y el rocío del cielo lo mojará. Durante siete períodos de tiempo vivirá de esta manera hasta que reconozca que el Altísimo gobierna los reinos del mundo y los entrega a cualquiera que él elija. 26 Sin embargo, quedaron en la tierra el tocón y las raíces del árbol. Esto significa que usted recibirá nuevamente el reino cuando haya reconocido que es el cielo el que gobierna”.

Diferencia Entre Vivir Una Experiencia Con Dios y Reconocer a Dios

Vivir una experiencia con Dios, es venir, ver milagros, llorar, que se te paren los pelos, sentirte a gusto en el servicio, levantar las manos, cada una de estas expresiones se vive en lo externo, sin hacer cambios en lo interno.

Reconocer a Dios, es entender que él tiene que ver en cada área de mi vida, entender que mi vida no puede funcionar, no puede caminar, no puede crecer sin la influencia de Dios, reconocer a Dios, es dejar que ese poder que experimente una vez, provoque en mí una transformación desde adentro hacia afuera y que no la detenga.

Muchos de los que están aquí hoy, tuvieron una experiencia con Dios, a muchos los sanó de cáncer, a otros los sacó de las adicciones, a otros les restauró el matrimonio, situación migratoria, hizo arreglos a tu favor, recibiste una herencia, recuperaste cosas que pensabas ya perdidas, te sacó del coma, te dio vida cuando los médicos habían dicho que no tenías esperanza, te dio una segunda oportunidad en una nueva relación, te dio el negocio que le pediste, pudiste entrar a la universidad que querías.

Ahora dime:

• ¿Qué pasó después de eso?
• ¿Cómo ha cambiado tu vida?
• ¿Te acercaste más a Dios?
• ¿Te alejaste más?
• ¿Te basto esa experiencia para poner tu confianza completamente en Dios?

Hay muchos que vivieron una experiencia con Dios, pero no les alcanzó para poner su confianza en él y dar el paso de bautizarse. Vemos en el versículo 27 que esa fue la actitud que Nabucodonosor tenía hacia Dios, ver

Daniel 4. 27 “Rey Nabucodonosor, le dice Daniel, por favor, acepte mi consejo. Deje de pecar y haga lo correcto. Apártese de su perverso pasado y sea compasivo con los pobres. Quizá, entonces, pueda seguir prosperando”.

Consecuencias De Solo Vivir De Una Experiencia Con Dios

Los versículos

Daniel 4. 28-30 dice: ”Sin embargo, todas estas cosas le ocurrieron al rey Nabucodonosor. 29 Doce meses más tarde, el rey caminaba sobre la terraza del palacio real en Babilonia 30 y mientras contemplaba la ciudad, dijo: “¡Miren esta grandiosa ciudad de Babilonia! Edifiqué esta hermosa ciudad con mi gran poder para que fuera mi residencia real a fin de desplegar mi esplendor majestuoso”.

Dios le dio a Nabucodonosor un año para que lo reconociera como Dios, pero continuó con su actitud de que por ser quien él era, merecía incluso tener las experiencias con Dios cuando él quisiera y verlas como un logro que merecía por ser rey, experiencias que no lo comprometían con nada.

Los Versículos

Daniel 4. 31-33 dicen: Mientras estas palabras aún estaban en su boca, se oyó una voz desde el cielo que decía: “¡Rey Nabucodonosor, este mensaje es para ti! Ya no eres gobernante de este reino. 32 Serás expulsado de la sociedad humana. Vivirás en el campo con los animales salvajes y comerás pasto como el ganado. Durante siete períodos de tiempo vivirás de esta manera hasta que reconozcas que el Altísimo gobierna los reinos del mundo y los entrega a cualquiera que él elija”.33 »En ese mismo momento se cumplió la sentencia y Nabucodonosor fue expulsado de la sociedad humana. Comió pasto como el ganado y mojó el rocío del cielo. Vivió de esa manera hasta que el pelo le creció tan largo como las plumas de las águilas y las uñas como las garras de un ave".

Podemos pensar que la apariencia de Nabucodonosor era aberrante y si, tal vez sí, pero no era lo más grave y triste que estaba atravesando, sino el hecho de que por no honrar a Dios, la razón le fue quitada, fue llevado por su orgullo y soberbia al plano de la insensatez, a no darse cuenta de su propia condición, todo esto a causa y como consecuencia de su arrogancia.

Quien vive en orgullo, en arrogancia, quien piensa que le hace un favor a Dios al venir a la iglesia o al dar los diezmos y ofrendas, toma la actitud que Nabucodonosor tenía cuando estaba en esta condición.

CONCLUSION

Recompensas Por Reconocer Quién Es Dios

Daniel 4. 34- 36 Cuando se cumplió el tiempo, yo, Nabucodonosor, levanté los ojos al cielo. Recuperé la razón, alabé y adoré al Altísimo y di honra a aquel que vive para siempre. Su dominio es perpetuo, y eterno es su reino. 35 Todos los hombres de la tierra no son nada comparados con él. Él hace lo que quiere entre los ángeles del cielo y entre la gente de la tierra. Nadie puede detenerlo ni decirle: “¿Por qué haces estas cosas?”. 36 »Cuando recobré la razón, también recuperé mi honra, mi gloria y mi reino. Mis asesores y nobles me buscaron y fui restituido como cabeza de mi reino, con mayor honra que antes. 37 »Ahora, yo, Nabucodonosor, alabo, glorifico y doy honra al Rey del cielo. Todos sus actos son justos y verdaderos, y es capaz de humillar al soberbio».

Una vez que Nabucodonosor recuperó la razón, hizo 3 cosas que lo ayudarían a recordar quien era Dios y que nos da dirección para salir de una actitud pasiva, e indiferente hacia Dios.

Alabo a Dios

Es decir, cada experiencia que vivo de ahora en adelante, cada milagro o suceso sobrenatural, me deben llevar a preguntarme, ¿para qué?, encontrar propósito, saber qué hay mucho más que solo una sanidad de cáncer, hay un plan de Dios para darle gloria con mi vida, esforzarme por encontrar ese plan o ese propósito.

Adoro a Dios

Doy adoración, cuando entiendo que adorar es un estilo de vida, yo adoro cuando le canto sí, pero también en mi forma de reaccionar, adoro cuando algo no sale como esperaba, adoro cuando escucho su voz, pero también cuando él queda en silencio, yo adoro cuando vivo en abundancia, pero también cuando paso por escasez, es decir yo no dejo de adorarlo por las circunstancias que esté atravesando, y las circunstancias no deben determinar tampoco mi adoración a Dios, o si debo adorarlo o no.

¿Sabes por qué? Adán tenía las mejores circunstancias, pero aun en esas circunstancias él y Eva pecaron contra Dios. Jesús tuvo las peores circunstancias, estando en el desierto, fue probado y venció, en el desierto, luego en la cruz, en su momento de debilidad más grande en su humanidad, entregó su vida en obediencia a Dios y ganó la salvación para todos nosotros.

Honro a Dios

Honra a Dios con tu manera de vivir, ¿cómo lo hago?, pon tu confianza en Dios, déjate procesar por él, no detengas el proceso de Dios en tu vida, reconoce donde detuviste tu proceso, cuál fue el último paso que diste, reconoce cuál es el siguiente y dalo, confía en Dios.

Yo no sé cuánto tiempo llevas extraviado de Dios, en una condición espiritual como la física que experimentó Nabucodonosor, sin entendimiento de Dios, golpeado por el mundo, te sientes desechado, y sabes que Dios te trajo hoy porque necesitas de su abrazo, necesitas saber que él te ama y que no importa si espiritualmente hoy te encuentras en la condición en la que se describió a este rey por no reconocer que es Dios quien gobierna sobre todo, pero hoy estás leyendo este mensaje y dices, no sé cómo comenzar, pero quiero un nuevo comienzo. Tan solo reconócelo como tu señor y salvador.

Si estás aquí y ya le entregaste tu vida a Cristo, pero no te has bautizado, y lo has pensado y lo has pensado, para, pon tu confianza en Dios, que toda buena dádiva y el regalo perfecto solo viene de parte de Dios, confía en él y avanza. De igual manera, si aún no comienzas a diezmar u ofrendar hazlo, si aún no estás en un grupo, que te detiene, si estás en un grupo, pero aún no estás sirviendo en un ministerio, no esperes más.

Dios no quiere que nadie se pierda y nos atraerá a él de cualquier manera, ya sea que escuchamos el consejo y lo buscamos o a través del quebrantamiento como lo hizo con Nabucodonosor; ambos procesos son muestra de su amor inagotable y de su infinita misericordia y lo hace para que lo alabemos solo a él, lo adoremos solo a él, lo honremos solo a él, y vivamos para declarar que:

NO HAY NADA MEJOR QUE SER CRISTIANO