INTRODUCCION

En esta serie de mensajes, estamos haciendo un recorrido por el libro de Santiago y descubriendo los diferentes obstáculos de fe que Santiago nos presenta.

Cada uno de los mensajes de esta serie la pudimos haber titulado: examen del corazón. Porque todos los obstáculos de la vida de fe que encontramos en el libro de Santiago están ligados con áreas de nuestros corazones que tenemos que tratar; áreas de nuestros corazones en los que podemos ser engañados por el enemigo, o áreas que aún no hemos confrontado o a las que no hemos muerto. Todas estas áreas nos limitan de ver la grandeza y la gloria de Dios.

La fe no provoca en nosotros, obtener o lograr más cosas, sino que provoca en nosotros admirar la grandeza y la gloria de Dios.

Nosotros esta mañana cantábamos: Yo lo he visto sanar y al muerto resucitar; no me digas que Él no puede, no me digas que Él no puede. Lo he visto restaurar el cuerpo y dar renovación mental; no me digas que Él no puede, no me digas que Él no puede.

El cantar y declarar esta canción, no significaba que hemos visto físicamente a Dios hacer todo eso. Pero porque decimos entonces: Yo lo he visto sanar, Yo lo he visto restaurar el cuerpo y dar renovación mental.

¿Por qué lo declaramos, aunque no lo hemos visto de forma literal?

porque cuando hemos sanado, cuando hemos sido restaurados, cuando hemos experimentado la renovación, la fe, eso nos informa que ha sido Dios quien ha hecho todo esto y ahora, podemos creer que lo que cantamos es verdaderamente real, es por medio de la fe.

¿Entonces qué es lo que sucede con estos obstáculos que estamos evaluando y estudiando?

Que nos limitan de creer en Él y como dijo Santiago en

Santiago 1: 6 - 8: “…porque una persona que duda tiene la lealtad dividida y es tan inestable como una ola del mar que el viento arrastra y empuja de un lado a otro. Esas personas no deberían esperar nada del Señor; su lealtad está dividida entre Dios y el mundo, y son inestables en todo lo que hacen”.

Por eso es que el hablar de estos obstáculos es tan importante. Como el obstáculo que hablaremos esta mañana que pudiéramos llamarle el obstáculo del favoritismo, pero prefiero llamarle el obstáculo del amor propio.

MENSAJE

La Maldad Oculta Del Amor Propio

Cuando leemos Santiago 2: 1 - 13 tenemos que recordar que, Santiago le estaba escribiendo a personas que estaban pasando por situaciones muy difíciles y complicadas, algunos de ellos terminaban trabajando como esclavos y dependían de las personas que estaban en una mejor posición para darles trabajo y sustento.

Cuando leemos esto podemos perder de vista lo importante que vemos en esta porción. Nos dicen

Santiago 1 - 7: 1: “Mis amados hermanos, ¿cómo pueden afirmar que tienen fe en nuestro glorioso Señor Jesucristo si favorecen más a algunas personas que a otras? Por ejemplo, supongamos que alguien llega a su reunión vestido con ropa elegante y joyas costosas y al mismo tiempo entra una persona pobre y con ropa sucia. Si ustedes le dan un trato preferencial a la persona rica y le dan un buen asiento, pero al pobre le dicen: «Tú puedes quedarte de pie allá o bien sentarte en el piso», ¿acaso esta discriminación no demuestra que sus juicios son guiados por malas intenciones? ¡Pero ustedes desprecian a los pobres! ¿Acaso no son los ricos quienes los oprimen a ustedes y los arrastran a los tribunales? ¿Acaso no son ellos los que insultan a Jesucristo, cuyo noble nombre ustedes llevan? “.

De primera intención pareciera que Santiago está hablando de solo las personas que le dan un lugar preferencial a las personas ricas y menosprecian a los que tienen menos. Aunque nos está hablando de lo errado que es el favoritismo o la preferencia, a la vez nos está hablando de algo más profundo.

Porque Santiago está confrontando un obstáculo de la fe, que nos lleva a dejar de enfocarnos en Cristo, en servir a las personas por amor y en hacer las cosas pensando en el beneficio que nos produce, o sea, que esto nos lleva a poner el enfoque en mí.

Creo que lo que Santiago está explicando es mucho más que el darle un lugar de preferencia a una persona. Por ejemplo, si usted y yo vamos en el carro y recogemos a mí esposa en algún lugar, lo lógico es que usted le dé a ella el lugar de preferencia en mi carro y le deje sentarse a mi lado.

Lo que significa entonces que si usted me dice pastor, entonces usted tiene preferencia con la pastora porque le dio el lugar en el que yo estaba sentado a ella, mi respuesta sería por supuesto que sí.

Ahora la pregunta sería, ¿Estoy pecando porque le pedí que te fueras al asiento de atrás y le di el lugar de preferencia a mi esposa en el carro? La verdad del caso es que, no sé. Pero voy a arriesgarme a pecar y le voy a pedir que se mueva al asiento de atrás, porque yo le voy a dar el lugar de preferencia en mi carro y en mi casa, pero sobre todo en mi vida y en mi corazón.

Sin embargo, lo que podemos ver aquí es que cuando tomamos decisiones, con la motivación incorrecta, eso revela algo mayor en nuestros corazones, y es el amor propio. Recordemos que Santiago le está hablando a personas que tenían necesidad y le daban un lugar preferencial a los ricos y los trataban diferente, no porque los admiraban, sino con la esperanza de obtener un beneficio de ellos.

El problema con esto es que cuando dependemos de personas para obtener un beneficio, ponemos en ellos nuestra esperanza y eso limita la fe y la confianza en Dios, para confiar más en lo que otros pueden hacer por nosotros, que en lo que Dios puede hacer por nosotros.

Ese es el verdadero problema que vemos en Santiago y que vemos en nuestra sociedad, pensamos solo en nosotros mismos, en lo que queremos, en lo que Yo anhelo, en lo que Yo necesito, pero en la Biblia no vemos eso, más bien Pablo le advirtió a Timoteo acerca de esto mismo y le dijo:

2 Timoteo 3.1-2 “Timoteo, es bueno que sepas que, en los últimos días, habrá tiempos muy difíciles. Pues la gente solo tendrá amor por sí misma y por su dinero. Serán fanfarrones y orgullosos, se burlarán de Dios, serán desobedientes a sus padres y malagradecidos. No considerarán nada sagrado”.

Pablo dijo que en los últimos días la gente solo se preocupará por ellos, solo tendrán amor por ellos y eso creará una sociedad de fanfarrones y orgullosos, que se burlaron de Dios y no considerarán nada sagrado.

¿Acaso eso no es lo que vemos hoy día?

Acaso no tenemos una sociedad de fanfarrones que se burlan de Dios y no consideran nada sagrado, no ven el matrimonio como sagrado, no ven la Palabra de Dios como sagrada, ya no ven ni la inocencia de la niñez sagrada y todo porque: Porque YO me siento que de esta manera, porque Yo siento amor por una persona del mismo sexo, porque Yo, Yo y Yo.

Esto nos sucede a todos, analice y se dará cuenta de que;

• El mayor conflicto en los matrimonios, es que el uno y el otro están pensando en lo que Yo quiero y lo que Yo necesito.
• La mayor razón por la que las personas no sirven a Dios; es que YO no tengo tiempo y quién se preocupa por mí, yo también necesito.
• La mayor razón por la que las personas no diezman, es porque YO me gané este dinero con el sudor de mí frente y Yo tengo necesidad.
• La mayor razón por la que las personas se congregan es porque YO necesito hoy una palabra que me anime; Yo necesito que me ayuden, Yo necesito que me vayan mejor las cosas y todo se trata del Yo.

Pero Pablo le advierte a Timoteo que tenga cuidado, de eso, que tenga cuidado del amor por sí mismo.

Muriendo Al Yo

El enfocarnos en nosotros no es cualquier cosa, es tan serio este asunto para Dios que el Apóstol Pablo cuando estaba hablando de las experiencias increíbles que ha tenido con Dios, él expresa en

2 Corintios 12: 7 - 9: “aun cuando he recibido de Dios revelaciones tan maravillosas. Así que, para impedir que me volviera orgulloso, se me dio una espina en mi carne, un mensajero de Satanás para atormentarme e impedir que me volviera orgulloso. 8 En tres ocasiones distintas, le supliqué al Señor que me la quitara. 9 Cada vez él me dijo: «Mi gracia es todo lo que necesitas; mi poder actúa mejor en la debilidad». Así que ahora me alegra jactarme de mis debilidades, para que el poder de Cristo pueda actuar a través de mí”.

Esto es tan serio para Dios que aun Pablo entendía que la razón por la que se le había dado una espina en su carne, un mensajero de Satanás que lo atormentaba, con el fin de que no se volviera orgulloso. Generalmente, cuando escuchamos esto, lo vemos como algo terrible. Pero la verdad del caso es que yo lo veo como algo impresionante, porque nos revela que Pablo había tenido tantas experiencias maravillosas con Dios que Dios por amor a Pablo y evitar que se volviera orgulloso y que eso lo limitara de continuar teniendo estas experiencias con Dios y relación con Dios, decide darle una espina en su carne, para que Pablo no llegara a la altivez y continuará disfrutando de la presencia de Dios.

Se imagina a Pablo quien había servido a Dios con tanta fidelidad y devoción, Pablo que había experimentado tantas cosas, que había permanecido fiel, Pablo que aun cuando lo apedrearon volvió a entrar a la ciudad para seguir predicando el Evangelio, ahora le suplicaba a Dios: por favor Señor quítame esta espina de mí carne, por favor te lo suplico, aleja a este mensajero de Satanás que me está atormentando. Y Dios diciendo: No Pablo, no te lo voy a quitar, porque te amo tanto que si te lo quito corres el peligro de volverte orgulloso, pensar en ti y enfocarte en ti. Así que Pablo Mí gracia es todo lo que necesitas; mí poder actúa mejor en la debilidad.

En otras palabras, en medio de tu dolor, Pablo, en medio de tu prueba, en medio de tu angustia, aún voy a hacer cosas mayores en tu vida y a través de tu vida. Él entendía esto al punto que él dice en los

5. 9 - 10: “… Así que ahora me alegra jactarme de mis debilidades, para que el poder de Cristo pueda actuar a través de mí. 10 Es por esto que me deleito en mis debilidades, y en los insultos, en privaciones, persecuciones y dificultades que sufro por Cristo. Pues, cuando soy débil, entonces soy fuerte”.

Esto me hace pensar en cuántas veces yo he tratado a Dios de la misma manera que las personas a las que Santiago les escribía, personas que trataban con honor a las personas con recursos. Me hace pensar cuántas veces le doy el lugar de honor de mí vida a Dios, porque necesito algo de Él, cuántas veces he orado, porque quiero algo de Él y no porque quiero estar con Él; cuántas veces lo he buscado, porque quiero que me saque de este o aquel problema y no porque anhelo más de su presencia; cuántas veces he hecho cosas esperando una recompensa de parte de Dios. En otras palabras, no soy diferente a las personas que Santiago reprendió, porque si me pongo a pensar la mayoría de las veces buscamos a Dios, por nuestro beneficio y no simplemente porque Él es Dios.

• ¿Cuándo fue la última vez que oramos, sin pedirle algo a Dios?
• ¿Cuándo fue la última vez que nos sacrificamos sin esperar nada a cambio?
• ¿Cuántas veces llegamos a un lugar o a la misma iglesia y nos enojamos si no nos tratan como esperamos?

Es porque si somos sinceros todos pecamos en hacer que todo se trate del YO.

CONCLUSION

Si meditamos en lo que dice en

Filipenses 2: 3 - 11: “No sean egoístas; no traten de impresionar a nadie. Sean humildes, es decir, considerando a los demás como mejores que ustedes. No se ocupen solo de sus propios intereses, sino también procuren interesarse en los demás. Tengan la misma actitud que tuvo Cristo Jesús. Aunque era Dios, no consideró que el ser igual a Dios fuera algo a lo cual aferrarse. En cambio, renunció a sus privilegios divinos; adoptó la humilde posición de un esclavo y nació como un ser humano. Cuando apareció en forma de hombre, se humilló a sí mismo en obediencia a Dios y murió en una cruz como morían los criminales. Por lo tanto, Dios lo elevó al lugar de máximo honor y le dio el nombre que está por encima de todos los demás nombres para que, ante el nombre de Jesús, se doble toda rodilla en el cielo y en la tierra y debajo de la tierra, y toda lengua declare que Jesucristo es el Señor para la gloria de Dios Padre”.

El meditar en esta escritura, nos debe de redarguir y quebrantar, porque Él siendo Dios, no pensó en Él y no consideró sus derechos, sino que renunció a sus privilegios divinos y se hizo como un esclavo al tomar la forma de hombre y se humilló a sí mismo hasta morir en la cruz y todo lo hizo por mí, todo lo hizo por amor a nosotros, no pensó en Él por pensar en nosotros y nosotros muchas veces no podemos dejar de pensar en nosotros para pensar en Él.

Medite en estas preguntas y rinda su corazón a Dios.

• ¿Pudiéramos examinar nuestros corazones en este día, orar y arrepentirnos de querer ser el centro de atención del mundo?
• ¿Podemos rendir nuestros corazones a Dios en este día y pedirle perdón por estar enfocado en el YO?
• ¿Podemos ser honestos y confesar como aun en nuestro matrimonio, nuestra familia y nuestra relación con Él nos hemos enfocado en nosotros?
• ¿Podemos abrir nuestros corazones a Dios, buscarlo en oración, pedirle que nos ayude y que nos perdone?

Hagamos un reto, en esta semana, renunciemos a nuestros derechos, seamos humildes, renunciemos a nuestros propios intereses, e interesémonos por los demás. Comencemos en nuestros matrimonios y familia.

En vez de pelear amar, en vez de reclamar servir, en vez de insultar bendecir, en vez de renegar orar.

Háblele a alguien de Cristo esta semana, no nos preocupemos si se burlan de nosotros, aunque nos rechacen, invitemos a alguien la próxima semana al culto, hagámoslo x1+, para alcanzar a uno más, bendecir a uno más, discipular a uno más, hasta que todos declaren que:

NO HAY NADA MEJOR QUE SER CRISTIANO